Gabriel Murta, que también es policía militar, usó su arma de fuego para repeler las protestas en pleno partido de la liga regional de Brumadinho

El terror invadió un partido de fútbol brasileño de la liga regional de Brumadinho, una región metropolitana de Belo Horizonte, cuando el árbitro Gabriel Murta sacó una pistola y comenzó a amenazar a los jugadores en pleno desarrollo del juego.

Como reportan los medios de comunicación locales, el colegiado fue agredido por un jugador en el duelo entre Amantes Da Bola y Brumadinho FC, por lo que decidió tomar un arma de fuego que tenía en el vestuario para amenazarlo en el campo de juego.

Según el presidente de la liga, Valdenir de Castro, los suplentes y los hinchas de Amantes Da Bola irrumpieron en el campo para protestar por la expulsión de un jugador. En esa invasión, un jugador habría atacado al juez con una bofetada y una patada.

Gabriel Murta, que de acuerdo con la Federación de Fútbol de Minas Gerais (FMF) también es policía militar, fue a su vestuario y tomó la pistola. Los árbitros asistentes intentaron contenerlo, pero no impidieron que use su pistola en el césped.

Los jugadores corrieron atemorizados y, como no había policía del partido, nadie fue arrestado. Murta se reunirá este martes 29 de septiembre con un psicólogo de la Federación y lo más probable es que sea sancionado.

Sin embargo, el jefe de la Comisión de Arbitraje de la FMF, Giuliano Bozzano, informó que Gabriel Murta dijo que fue golpeado, se sintió amenazado y solamente usó el arma para defenderse.

Miércoles, 30 de septiembre de 2015