UN GESTO PARA IMITAR
Llegó a vender el auto para que no sacrifiquen a sus perros
Caitlin McAdam invirtió casi 10 mil dólares peleando contra una inminente "sentencia de muerte" que había contra sus dos mascotas: Jake y Lucy.
Jake y Lucy, un pitbull y un labrador negro, fueron capturados por control animal en febrero pasado después de haber sido acusados de matar al gato del vecino.
Nota Relacionada: Lleva a su perro en moto y causa indignación A pesar de que no había ninguna evidencia que los ligara a su muerte, McAdam recibió cargos de "perros peligrosos", según informó la CNN. A ella le informaron que Jake y Lucy iban a ser sacrificados si los encontraban culpables o si ella no podía recolectar el dinero para pagar por su embargo mientras los perros aguardaban su día en la corte. Su destino inicialmente se definiría el día de su juicio, donde McAdam podría abogar su caso ante seis jueces.
Las autopsias del gato (que se han mantenido en "secreto") estaban resguardadas para utilizarse como evidencia, y el abogado de McAdam reunió testigos expertos para llamarlos en el estrado.
Esto parece absurdo. Pero debido a que los cargos de los perros son presentados contra el dueño de las mascotas, como McAdam, estos casos atraviesan el mismo proceso que otras ofensas criminales.
Para pagar por el depósito semanal de Jake y Lucy de 250 dólares, junto con los costos legales, McAdam y su familia debieron apelar a cada centavo que pudieron encontra, vendiendo su auto viejo, utilizando el reembolso de los impuestos y recabando fondos a través de sus redes sociales.
Hasta la fecha McAdam recolectó más de 6.000 dólares en deudas legales (incluso después de que su abogado realizara trabajo pro bono) y 2.500 dólares en costos de hospedaje. Ha gastado más de 1.000 dólares en la autopsia del gato, el asesoramiento de comportamiento, los costos de entrenamiento que la corte ordena, entre otros gastos.
Diversos dueños de perros a lo largo de Estados Unidos se identifican por situaciones similares enfrentando inmensas deudas por violaciones de pequeñas mascotas como un perro perdido en un vecindario o un perro ladrando demasiado. Algunos incluso enfrentan arresto cuando no pueden pagarlo.
Otros dueños han tenido que sacrificar a sus perros porque no pueden pagar los bienes o tarifas para recuperarlos de control animal.
Jueves, 4 de junio de 2015
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