Se trata de Guillermo Arribillaga que murió de una trombosis por falta de asistencia médica. El hombre vivía a tan sólo 6 cuadras del Hospital "María Auxiliadora" de la localidad de Saladas, pero los enfermeros no le tomaron el pedido de la urgencia. Su esposa denunció el hecho y dijo que se trató de una muerte que podía evitarse.

El dramático hecho ocurrió el pasado 30 de marzo en el Hospital “María Auxiliadora” de la ciudad de Saladas. Carmen Soto denunció en Sudamericana que su esposo Guillermo Arribillaga murió por falta de asistencia médica ya que la ambulancia tardó poco más de 40 minutos.

“Mi esposo se levantó con un fuerte dolor en la pierna y me di cuenta que se trataba de algo grave. Llamé urgente al hospital y me dijeron que se dirigían a mi domicilio”, contó la mujer que vive a tan sólo 6 cuadras del centro asistencial.

Su esposo no paraba de gritar y pedir socorro. Soto muy asustada por la situación vuelve a llamar al hospital pidiendo que apuren con la ambulancia porque Arribillaga estaba muy mal.

“Llamé y me atendió otra enfermera. Me dijo que habían tomado el pedido porque solicité en otra área. Yo estaba muy nerviosa y pedía a gritos que mandaran la ambulancia porque mi esposo estaba muriendo”.

En el segundo llamado, el personal del hospital preguntó a Carmen Soto sobre la obra social y de cual se trataba. “Mi esposo estaba casi muerto y me preguntaban por teléfono qué obra social teníamos”, dijo la denunciante completamente indignada.

La ambulancia tardó cerca de 40 minutos, pero cuando llegó el hombre había muerto de una trombosis en la pierna. “Llegó la ambulancia pero sin el enfermero. Con mi esposo ya no se podía hacer nada porque estaba muerto. Falleció en manos de mi hijo” recordó.

“Con el dolor que me invade, pido a las autoridades a quienes le compete el área de salud que intervengan y evalúen las conductas negativas que solo conducen al desprestigio. No quiero que lo que me pasó le suceda a otros”, finalizó.

Miércoles, 22 de abril de 2015