ENTÉRATE PORQUE?
¿Sabés por qué la música es lo mejor para los chicos?
Los beneficios son muchos y variados. Conocelos en esta nota.
- El lenguaje: La música comparte área cerebral con el lenguaje. El cerebro infantil no distingue diferencia entre ambas, pues las palabras se aprenden al inicio a través de la musicalidad. Por otro lado la escritura de la música, con sus sencillos símbolos en los pentagramas es como otro alfabeto, con sus frases. Por ello facilita el aprendizaje de otros idiomas.
- El razonamiento lógico-matemático: La música está hecha de ritmos y pausas, variaciones de tiempos, intensidades, conjuntos de instrumentos, en suma, pura matemática, con lo que el aprendizaje de ésta se ve muy mejorado, ya que estimula el análisis, la síntesis y el razonamiento, así como la estructuración de los mapas mentales.
- Mejora la concentración y la memoria: La música acapara nuestra atención y llega a cualquier función cognitiva. Estimula muchos tipos de memoria: la auditiva-sensitiva, la integración visual-auditiva, cinestésica (de movimiento)-auditiva, la afectiva y todas las relacionadas con el aprendizaje en general.
- Mejora la inteligencia y la autonomía: La escucha de las múltiples combinaciones musicales prepara el cerebro para ser capaz de encontrar nuevas formas y ampliar miras. Al activar distintos tipos de inteligencia se favorece la autonomía, la capacidad de valerse por sí mismo.
- Ayuda al control y a la psicomotricidad: El conocimiento del ritmo a través de la percusión o el soplo de un instrumento adecuados conlleva un proceso de coordinación y de control del movimiento durante el desarrollo psicomotriz del niño, que se completa con la lectura de la partitura. Además, la escucha estimula la verticalidad y una posición de la columna vertebral correcta. ¿Lo sabías? Así se refrescan tus animales cuando hace mucho calor
- Fomenta la sensibilidad artística: Dejando aparte la ejecución técnica, la experimentación fomenta la creatividad en la expresión, y también el desarrollo del criterio artístico, dadas las referencias directas
- Las emociones: La percepción de la música es universal en el sentido de que muestra y mueve unas u otras emociones, con lo que permite conocer una amplia gama de distintos estados de ánimo. La información de las sensaciones puede ser más precisa mediante la música que mediante el lenguaje, que a veces puede confundirnos con distintos significados
- Favorece la escucha y apertura: El desarrollo de la escucha tanto de lo propio como lo de los demás tiene como consecuencia favorecer el movimiento de apertura y receptividad en general para cualquier percepción que venga de fuera y facilitar con ello la comunicación
- Crea hábitos de autoescucha y reflexión: Al escuchar el instrumento o el propio canto, analizar y modificar para corregir o afinar mejor, se va instalando un hábito de escucharse a uno mismo, incluidas las sensaciones y emociones, y con ello también el análisis y la reflexión de lo que nos decimos a nosotros mismos
- Un factor de socialización: La música crea vínculos porque se comparten sentimientos. Ello favorece un clima de colaboración y respeto, más aún si en vez de escucharla además se practica y crea, sea en equipo o individualmente para los demás. Si se participa en una banda u orquesta se fomentan las habilidades para relacionarse con los demás miembros ¿Te gusta el té verde? Enterate cuándo sí y cuándo no tomarlo
- Un placer bueno para el sistema nervioso: El disfrute en la escucha o ejecución de la música hace que segreguemos endorfinas, que nos ayudan a sobrellevar las angustias del día debidas a los pequeños conflictos cotidianos
- Una terapia: Cada vez está más en boga la musicoterapia, que ofrece un amplio abanico de tratamientos con ella para muy diversos casos: físicos, afectivos o mentales. Se conocen efectos regeneradores a nivel biológico, aunque todavía falte por demostrar. También sus virtudes terapéuticas y en ocasiones sanadoras han ayudado a liberar emociones, así como a sobrellevar pensamientos negativos y estados de ánimo encallados o poco fructíferos
- Enseña valores y autoestima: El aprendizaje de la música requiere un esfuerzo y perseverancia, valores que parecen haberse perdido en este nuestro mundo en que parece prevalecer la inmediatez en tantos ámbitos. Todo este trabajo realizado se presenta con el tiempo con un logro del cual estar orgulloso y valorarse a sí mismo. Esto, añadido al hecho de tocar en público, además hace que se superen algunos miedos e inseguridades
Viernes, 27 de febrero de 2015
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