UCRANIA
Petro Poroshenko fue electo presidente de Ucrania
El magnate de las golosinas arrasó en las urnas en Ucrania y será el próximo mandatario de la convulsa ex república soviética, en un triunfo que, aunque aún no era oficial, ya fue reconocido por su principal rival.
En sus primeras declaraciones tras difundirse sondeos a boca de urna que le dieron una aplastante victoria con la que evitaría una segunda vuelta, Poroshenko prometió resolver el conflicto con los separatistas que este mes declararon la indepedencia en dos provincias del este del país y que hoy impidieron la votación.
"El país tiene un nuevo presidente", celebró el multimillonario de 48 años junto a su familia y sus seguidores, en una conferencia de prensa en Kiev poco después de conocerse sondeos a boca de urna que le otorgaron entre el 55 y el 57% de los votos.
Según las mismas encuestas, la ex primera ministra Yulia Timoshenko quedó lejos en un segundo puesto con entre 10 y 13%.
En su primera declaración tras el cierre de las mesas, Timoshenko, la referente más radical del oeste pro europeo del país, concedió la derrota, aun cuando todavía faltaban varias horas para la difusión de los primeros resultados preliminares.
"Estas fueron unas elecciones justas y limpias. Posiblemente, no hayamos visto unas elecciones como éstas en 23 años de independencia", aseguró.
En su primera declaración tras el cierre de las mesas, Timoshenko, la referente más radical del oeste pro europeo del país, concedió la derrota, aun cuando todavía faltaban varias horas para la difusión de los primeros resultados preliminares "Haremos todo lo posible para ayudar a construir una Ucrania fuerte y europea y celebrar finalmente un referendo sobre el ingreso en la OTAN", dijo, recordando una de sus principales promesas de campaña.
Pero Poroshenko, la séptima fortuna de Ucrania, ya dejó en claro cuál será la hoja de ruta para el primer tramo de su gobierno. En el mismo discurso en el que declaró su victoria, el dueño del mayor emporio de chocolate del país anunció que convocará a elecciones parlamentarias este año y prometió reunirse con el presidente ruso, Vladimir Putin, porque "Rusia es importante".
Finalmente, adelantó que su primer viaje oficial será a Donetsk, una de las dos provincias orientales que este mes declararon la independencia y pidieron entrar a la Federación Rusa. "Ucrania debe ser un Estado unitario", sentenció.
"El país se encuentra en medio de una guerra y una agresión. Para implantar la paz en la parte sur de Ucrania hay que negociar con todas las partes, incluida Rusia", opinó el futuro mandatario, en referencia al levantamiento separatista en Donetsk y Lugansk y la reciente anexión rusa de la sureña Crimea, sobre el Mar Negro.
"Sin la participación de Rusia, no es posible hablar de una verdadera seguridad en nuestra región. Encontraremos el formato y, desde luego, habrá encuentro con Putin", prometió.
A diferencia de sus rivales, Poroshenko tiene buenos contactos tanto con Rusia -fue el ministro de Economía y Comercio del presidente pro ruso recientemente derrocado, Viktor Yanukovich- como con las potencias occidentales -apoyó abiertamente las masivas protestas pro europeístas que terminaron con la salida de Yanukovich del poder en marzo pasado.
También es significativo que el oligarca haya dicho que su primer viaje oficial, cuando asuma en 15 días, será al sublevado este del país, y no a Bruselas, a la sede la de la Unión Europea, para firmar un acuerdo de integración económica, como había anunciado hace unos días el primer ministro interino, Arseni Yatseniuk.
Poroshenko, no obstante, fue muy claro en sus primeras declaraciones al marcar dónde estará el norte de su gobierno. "Hoy tiene prioridad concretar la senda europea, el deseo europeo de Ucrania", destacó, dirigiéndose a las más de un millón de personas que a finales del año pasado y principios de este salieron a las calles de Kiev para rechazar los planes de Yanukovich de un nuevo acercamiento a Rusia.
Más aún, el futuro mandatario volvió a calificar de "terroristas" a los separatistas que tomaron parte del este del país hace casi dos meses y que hoy lograron boicotear las elecciones en la mayoría de los distritos de Donetsk y Lugansk.
Los separatistas pro rusos impidieron la elección presidencial en 15 de los 22 distritos de la provincia de Donetsk, mientras que en los siete restantes, la participación fue baja.
En tanto, según datos oficiales, en Lugansk, el gobierno separatista consiguió evitar la votación en diez de las doce circunscripciones que tiene esa región fronteriza con Rusia.
La victoria política de los separatistas pro rusos dejó, sin embargo, al menos dos muertos en la localidad de Novoaydar en una situación aún poco clara.
Donetsk y Lugansk suman cerca de un 15% del padrón nacional.
Tras conocerse los primeros y contundentes bocas de urnas, Miroslav Rudenko, uno de los líderes separatistas, acusó hoy a Poroshenko de financiar y respaldar la operación militar lanzada por el gobierno en el este del país.
"¿Cómo va a haber un diálogo?", se preguntó Rudenko, quien reclamó que el nuevo presidente suspenda toda acción militar, retire las tropas de la región y reconozca su "soberanía".
Poroshenko no sólo prometió resolver el conflicto y recuperar el control del este del país, sino que muchos de los ucranianos que lo votaron hoy lo hicieron para que termine ya con el levantamiento separatista pro ruso en Donetsk y Lugansk.
Lunes, 26 de mayo de 2014
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