EUROPA
Diputados franceses aprobaron un ajuste por 50.000 millones de euros
Tras dos semanas de intensas negociaciones y de contrapuntos internos, el primer ministro francés, el socialista Manuel Valls, logró que la Cámara de Diputados apruebe un ajuste para reducir el déficit fiscal.
El "programa de estabilidad presupuestaria" para los próximos tres años del gobierno socialista del presidente Francois Hollande, que congela salarios de estatales, pensiones y beneficios sociales, recibió 265 votos a favor y 232 en contra, mientras que 67 diputados se abstuvieron.
En la Asamblea Nacional (Diputados) el PS cuenta con 291 de las 577 bancas (supera por dos escaños la mayoría absoluta). Aunque esta noche 41 se abstuvieron, el oficialismo pudo apoyarse en la quincena de votos del partido Radical de Izquierda (PRG).
El principal partido opositor, la conservadora Unión por un Movimiento Popular (UMP), votó en contra, al igual que gran número de centristas de la Unión de Demócratas Independientes (UDI), la ultraizquierda y la mayoría de los ecologistas. Unos treinta diputados centristas decidieron abstenerse.
"Este es un mensaje fundacional para lo que queda del quinquenio", celebró el primer ministro Valls.
En las últimas semanas, el corte liberal del recorte presupuestario profundizó las divisiones dentro del PS Antes de una votación que se avizoraba incierta, y frente a los diputados en el hemiciclo, Valls aseguró que "el resultado de la votación condicionará, a la vez, la legitimidad del gobierno y su capacidad de gobernar y, sobre todo, la credibilidad de Francia".
En las últimas semanas, el corte liberal del recorte presupuestario profundizó las divisiones dentro del PS. Varios diputados oficialistas presentaron propuestas alternativas al ajuste y dejaron entender que no apoyarían el proyecto de su partido.
Esto llevó a Valls a ceder a la presión del ala izquierdista de su propio partido para "edulcorar" el nuevo ajuste presupuestario al evitar congelar las jubilaciones más bajas.
"Es un voto de confianza a mi gobierno", reiteró hoy el franco-español Valls, quien hace un mes sucedió a Jean-Marc Ayrault. El voto es consultivo, por lo que no implica veto al proyecto oficial. Pero es pero políticamente crucial para el flamante premier.
El programa de estabilidad presupuestaria incluye un pacto de responsabilidad por el cual el gobierno exonerará a las empresas de sus cargas familiares por 30.000 millones de euros entre 2015 y 2017, a cambio de que éstas generen nuevos puestos de trabajo.
"Un oficialismo que no apoya a su gobierno es un oficialismo que desaparece", sostuvo el ex primer ministro conservador Francois Fillon en la radio France Inter.
El ahora diputado Fillon aclaró que votó contra el programa de estabilidad presupuestaria -pese a que "la intención del gobierno es buena"- porque "no quiero ser cómplice de un proyecto irrealizable que reposa sobre hipótesis fantasiosas".
Entretanto, el jueves la mayoría de los sindicatos franceses decidieron unificar su reclamo al organizar conjuntamente más de una centena de manifestaciones en toda Francia para celebrar el día del trabajador y protestar contra el nuevo ajuste presupuestario.
Otras importantes manifestaciones, de empleados públicos y ferroviarios, entre otros, están previstas para el mes próximo. notas relacionadas La desocupación en España llegó a casi seis millones de personas IMPRIMIRACCESIBLEACCESIBLE
Miércoles, 30 de abril de 2014
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