La mandataria Park Geun-hye pidió perdón por la falta de prevención y la respuesta inicial al naufragio del buque Sewol, que dejó 302 muertos y desaparecidos.

"Pido disculpas a la gente; estoy muy afligida por la pérdida de tantas valiosas vidas", afirmó la mandataria durante una reunión con su gabinete. "No sé cómo pedir disculpas por la falta de prevención de este accidente, y por la primera respuesta insuficiente", agregó.

En el buque viajaban 476 personas, la mayoría estudiantes de 16 y 17 años, de las cuales 174 fueron rescatadas. Las autoridades recuperaron cerca de 200 cuerpos y los buzos continúan la búsqueda de los que siguen desaparecidos.

El gobierno surcoreano fue muy criticado por la respuesta a la emergencia y el domingo renunció el primer ministro, Chung Hong-won, renunció tras asumir la "mala gestión" que siguió al naufragio fue toda su responsabilidad.

"Tras presenciar el dolor de los familiares de las víctimas y el enfado de la gente, creo que es mi deber asumir todas las responsabilidades y renunciar", anunció Chung en una conferencia de
prensa en Seúl.

Park también es criticada y hoy recibió la indignación de los familiares de las víctimas cuando visitó el altar creado en Ansan, 30 kilómetros al suroeste de Seúl, la ciudad del secundario al que
pertenecían los 260 alumnos y profesores que están entre los muertos y desaparecidos del naufragio.

Para intentar acallar el enfado, la presidenta prometió crear una agencia gubernamental, encargada de prevenir y gestionar desastres.

Todavía se desconocen las razones del incidente, pero la teoría más fuerte es que unas modificaciones que se hicieron al barco lo hicieron más inestable para el traslado de vehículos y carga. Los 15 miembros de la tripulación, incluyendo al capitán, permanecen detenidos y podrían ser acusados de "negligencia".

Martes, 29 de abril de 2014