CRISIS POLÍTICA
Afiebrado y en plena crisis, el presidente ucraniano pidió licencia
Tras aceptar la renuncia de su gobierno, derogar leyes restrictivas que había aprobado su partido y otorgar una amnistía que beneficia a la oposición que ocupa edificios públicos y el centro de la capital, el presidente ucraniano, Viktor Yanukovich, pidió licencia médica.
El mandatario aseguró que las autoridades de la ex república soviética cumplieron todos sus compromisos para salir de la crisis que se desató hace más de dos meses, cuando Yanukovich desistió de firmar un acuerdo de asociación con la Unión Europea (UE) y causó masivas protestas que devinieron en violentos enfrentamientos.
"Hemos cumplido todos los compromisos asumidos. El Parlamento aprobó una ley de amnistía que garantiza la liberación a los manifestantes detenidos durante el conflicto", indicó Yanukovich en un comunicado publicado en su web oficial.
Yanukovich, que tomó licencia médica por padecer fiebre alta por una afección respiratoria aguda, lamentó que "la oposición sigue echando leña al fuego, llama a la gente a seguir en la calle a pesar del frío en aras de las ambiciones políticas de algunos líderes", informó la agencia de noticias EFE.
Y recordó que los pasos que dio en los últimos días el oficialismo -la dimisión del gobierno del primer ministro Nikolái Azárov, la revocación de las leyes represivas que provocaron los disturbios de la semana pasada y la ley de amnistía aprobada anoche- fueron negociados con los líderes de la oposición.
"El Parlamento aprobó una ley de amnistía que garantiza la liberación a los manifestantes detenidos durante el conflicto", Viktor Yanukovich El presidente ucraniano acudió anoche a la sesión de la Rada Suprema (Parlamento) poco antes de que se aprobara una ley de amnistía condicionada para los manifestantes detenidos durante las protestas de los últimos dos meses, que la oposición rechaza.
Los oficialistas del Partido de las Regiones de Yanukovich y el Partido Comunista aprobaron al filo de la medianoche una amnistía que sólo entrará en vigor cuando los activistas opositores abandonen todos los edificios administrativos que ocupan desde el inicio de las multitudinarias protestas a finales de noviembre.
Sin embargo, el líder del partido nacionalista ucraniano Svoboda (Libertad), Oleg Tiagnibok, afirmó hoy que los manifestantes no abandonarán los edificios administrativos ocupados para que entre en vigor la ley de amnistía.
Tiagnibok denunció que la ley de amnistía convierte en rehenes a los manifestantes detenidos. Y subrayó que la norma fue aprobada incumpliendo el reglamento, pues fue votada sin debate previo.
Los grupos parlamentarios opositores, que exigían la aprobación del perdón sin ningún tipo de condiciones, no participaron en la votación.
Por su parte, el diputado del partido opositor Batkivshina (Patria) Andréi Porubi, dijo que "la oposición se siente engañada. Los manifestantes no abandonarán el Maidán (la plaza de la Independencia) ni los edificios administrativos".
Las protestas opositoras estallaron el 21 de noviembre cuando Yanukovich aplazó la firma del Acuerdo de Asociación con la UE.
Ante las crecientes manifestaciones europeístas en el centro de Kiev, ocupado por la oposición, la mayoría parlamentaria oficialista aprobó el 16 de enero una serie de leyes para restringir el derecho de reunión y otras libertades civiles.
Tres días después, se registraron en la capital violentos choques entre manifestantes y policías antidisturbios que causaron al menos seis muertos y centenares de heridos.
El 23 de enero, el gobierno y la oposición acordaron una tregua e iniciaron negociaciones, en las que la oposición obtuvo casi todos sus objetivos, salvo la convocatoria a elecciones presidenciales y parlamentarias anticipadas.
Viernes, 31 de enero de 2014
|