ACTIVIDAD PRESIDENCIAL
Maduro limita la rentabilidad empresarial y no toca el dólar
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, reveló que limitará por decreto a 30 por ciento la rentabilidad de todas las actividades económicas y que el tipo de cambio fijo oficial se mantendrá este año en su actual cotización de 6,30 bolívares por dólar.
Asimismo, afirmó que modificará la legislación cambiaria para permitir que el sector privado ofrezca divisas en las subastas oficiales, fusionará los actuales ministerios de Banca Pública y de Economía y Finanzas, y creará la Superintendencia de Costos, Ganancias y Precios Justos.
Estos y otros anuncios formaron parte del informe de su primer año de gobierno, que Maduro brindaba esta noche ante la Asamblea Nacional (AN, parlamento unicameral) y que, según dijo, se alinean con el objetivo de “la construcción del poderío económico de Venezuela como potencia energética, agroalimentaria e industrial, desde ya y a futuro”.
El jefe del Estado aseguró que profundizará políticas de promoción del ahorro, creará un “plan nacional de facilidades de inversión de desarrollo económico” y que la cuestionada Comisión de Administración de Divisas (Cadivi) será absorbida por el nuevo Centro de Comercio Exterior.
Maduro designó a Rodolfo Torres al frente del nuevo Ministerio de Economía, Finanzas y Banca Pública; a Nelson Merentes, hasta ahora ministro de Economía y Finanzas, como presidente del Banco Central de Venezuela (BCV), y a José Khan como ministro de Comercio.
Al anterior titular de Comercio, Alejandro Fleming, lo designó a cargo del Centro de Comercio Exterior, y nombró a la ministra de la Mujer, Andreína Tarazón, como superintendenta de Costos, Ganancias y Precios Justos.
“Entendemos perfectamente lo que significa y nos va a costar hacer de la economía venezolana una fortaleza sustentable en la promoción de las fuentes de trabajo, en la diversificación de nuestros emprendimientos productivos, en la aportación de valor agregado a nuestros bienes y en la socialización de los medios de producción”, señaló Maduro.
Remarcó que “se trata de la construcción del poderío económico de Venezuela como potencia energética, agroalimentaria e industrial, desde ya y a futuro”.
“Para ello será necesario consolidar los avances en cuanto al desarrollo del marco normativo, de la política de inversiones soberanas, para que los recursos e intereses nacionales estén al servicio e intereses de nuestro pueblo, de la construcción de un mundo de justicia y paz”, sostuvo.
“Construyamos la cultura del trabajo, superemos el consumismo como desviación social y echemos una sólida base para el socialismo del siglo XXI, que debe ser la Venezuela potencia”, exhortó.
“Se trata de la construcción del poderío económico de Venezuela como potencia energética, agroalimentaria e industrial, desde ya y a futuro” Esa meta, explicó, “es un reto inmenso que necesariamente debe partir de la comprensión plena y crítica de la realidad venezolana”, sobre todo al considerar que el país está “aún en el curso de un proceso de transición hacia el socialismo”.
El mandatario citó al fallecido político y guerrillero venezolano Alfredo Maneiro, quien sostenía que “la revolución no es sólo un bistec en cada mesa, ni mucho menos un televisor en cada cuarto y en absoluto un carro en cada puerta”, sino que “la revolución es un cambio en las relaciones humanas”.
La sesión especial de la AN comenzó pasadas las 18.15 (19.45 en la Argentina), dos horas y cuarto más tarde del momento programado, y media hora después el mandatario comenzó a leer su extenso mensaje, transmitido en vivo por la cadena nacional de radio y televisión, y que a las 21.30 (23 en la Argentina) aún no había terminado.
Al comienzo de su alocución, Maduro rindió homenaje a su fallecido antecesor, Hugo Chávez, de quien dijo que “es inolvidable su dignidad, su sonrisa a flor de piel, su confianza en el futuro y su fuerza para trabajar”.
Recordó que la última vez que Chávez rindió cuentas a la AN, hace dos años y cuando ya se le había diagnosticado el cáncer que terminó con su vida, “su discurso duró nueve horas y media” y tuvo lugar un mes antes de que fuera operado por tercera vez por esa dolencia.
El jefe del Estado afirmó que 2013 “fue el año más duro, el año más difícil de la revolución a lo largo de su historia”, porque “nada se compara con la magnitud de la pérdida física del comandante Hugo Chávez”.
El presidente fustigó a “los que creían que la revolución moriría con la muerte del comandante Chávez”, aseguró que “Venezuela cambió para siempre” y reiteró que “la revolución bolivariana se ha hecho y se está haciendo para profundizar la democracia”.
La de esta noche era la primera rendición de cuentas de Maduro, quien asumió la Presidencia el 19 de abril pasado pero ya estaba a cargo del gobierno desde el 8 de diciembre de 2012, cuando Chávez partió por última vez a La Habana para operarse por el cáncer que padecía y por el que falleció el 5 de marzo último.
Jueves, 16 de enero de 2014
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