El presidente de Francia, Francois Hollande, aseguró que su país es "una nación que porta valores, que libera a otras naciones de la opresión, un país que va al socorro de los más débiles".

"En República Centroafricana había urgencia, los enfrentamientos interconfesionales podían degenerar en baño de sangre. Cuando se cometen crímenes contra la humanidad, es el honor de Francia que se compromete, sin dudarlo", declaró Hollande en un homenaje a los dos militares muertos la semana pasada en Bangui, la capital de ese país africano.

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El presidente justificó así la intervención militar en la ex colonia gala, que desde marzo de 2013 está sumida en un caos tras el derrocamiento a manos de los rebeldes Séléka de Fancois Bozizé, quien llegó al poder hace una década mediante otro golpe de Estado.

"Una vez más el mundo mira a Francia. Es porque somos un gran país, capaz de expresar una voz de dignidad, de emancipación. Ese estatus, ese lugar, Francia se lo debe a su ejército", se vanaglorió Hollande frente a los ataúdes de los dos paracaidistas.

Desde su llegada al poder en mayo 2012, el socialista Holllande lanzó o continuó operaciones militares en Costa de Marfil, Somalia y Mali Sin embargo, Francia, que fue autorizada por la ONU para intervenir, es acusada por la comunidad musulmana centroafricana de apoyar a los cristianos al marcar como su prioridad desarmar primero a los ex rebeldes Séléka (en su mayoría musulmanes), quienes temen quedar a merced de represalias.

Ex colonia francesa hasta 1960, año de su independencia, la República Centroafricana cuenta con importantes reservas minerales, principalmente oro, diamante, uranio y petróleo. Sin embargo, es considerado uno de los países más pobres del mundo.

Desde su llegada al poder en mayo 2012, el socialista Holllande lanzó o continuó operaciones militares en Costa de Marfil, Somalia y Mali.

"La nueva implicación militar de Francia en África es el último ejemplo de un concepto que podríamos llamar la doctrina Hollande: una forma deliberadamente medida de intervención armada apoyada en el derecho internacional y el consentimiento del país en cuestión" subrayó el diario inglés The Guardian.

"En suma, el presidente francés elaboró una nueva forma de invadir países: lo hace como debe hacerse", resumió.

El diario liberal británico califica la intervención francesa de "geopolítica" como forma de "contrarrestar el creciente peso de China en Africa, que despliega su influencia sin asumir sus responsabilidades".

El mandatario socialista se convirtió este año en el más ferviente impulsor para obtener el visto bueno de Naciones Unidas para conformar una coalición internacional para intervenir militarmente en Siria.

Martes, 17 de diciembre de 2013