EN CERCANÍAS DEL PUENTE BLANCO
Pirayuí: delincuentes atacaron a un joven para robarle la motocicleta
Tres malvivientes interrumpieron la circulación de un estudiante para sustraerle el rodado. El hecho ocurrió en las primeras horas de ayer. La víctima trató de evitar el robo y se trenzó a golpes de puño con uno de los ladrones.La Policía a las pocas horas recuperó la moto.
Un joven de 20 años fue atacado por tres delincuentes en el barrio Pirayuí. La víctima se trasladaba en motocicleta, y en cercanía del denominado puente blanco, fue interceptado por los malvivientes que se apoderaron del vehículo. El hecho ocurrió ayer a las 0:5. Dos horas más tarde, la Policía recuperó el rodado.
El motociclista circulaba por la calle Ojeda -arteria que une el antiguo Pirayuí con las 550 Viviendas del Nuevo-. A escasos 150 metros del puente blanco, fue atacado por un grupo de delincuentes para robarle la moto y otras pertenencias.
La víctima -de nombre Marcelo-, cursa el profesorado de Educación Física y regresaba a su hogar luego de una larga jornada de estudio.
Cuando los delincuentes avanzaron sobre su humanidad, decidió proteger sus elementos de estudios que estaban dentro de una mochila -en el interior había carpetas y una computadora portátil con archivos importantes para la carrera que está cursando-. El estudiante se ajustó las cintas del bolso y decidió bajar de la moto para defenderse.
Mientras dos se apoderaban del rodado -marca Zanella ZB de 110 CC-, uno de los malvivientes se trenzaba a golpes de puño con la víctima para intentar robarle otros objetos de valor. En la pelea, a Marcelo se le cae el teléfono celular. Los delincuentes aprovecharon la situación para apoderarse de ese objeto y luego huyeron.
El estudiante quedó en soledad y en medio de un asentamiento y zonas de campo. Su destino eran las 100 viviendas del Nuevo Pirayuí. Tras el difícil momento que le tocó vivir, pidió ayuda a un par de motociclistas pero no pudo ser asistido.
A los pocos minutos, pasó un efectivo de la comisaría Vigésima y el joven informó al uniformado lo ocurrido -e inmediatamente formalizó la denuncia en la mencionada dependencia-.
Allí comenzó el trabajo de rastrillaje que involucró a motos y patrulleros. Cerca de las 2, los efectivos localizaron el vehículo sustraído en una calle de tierra que bordea el arroyo Pirayuí. El caño de escape ya estaba desguazado y cerca de la moto también encontró el teléfono móvil de la víctima.
Elogios y críticas El estudiante terciario agradeció el rápido accionar de la Policía, pero a su vez criticó la falta de iluminación en la zona comprendida desde Cuba y Ojeda y todo el trayecto hasta llegar al complejo habitacional del Nuevo Pirayuí -hay alrededor de 2 kilómetros-.
“Tengo que agradecer el trato y el trabajo de la Policía. Por suerte pude recuperar mis elementos. Fue un hecho delictivo con final feliz pero si tenían armas podría ser otra la historia”, dijo Marcelo.
Por otro lado, informó que la zona se encuentra en penumbras ya que el alumbrado público es escaso. “No hay mantenimiento ya que muchas de las lámparas son rotas por precoces delincuentes que con gomeras se encargan de destruir”, enfatizó.
Jueves, 31 de octubre de 2013
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