La justicia de Rosario denunció que se habría quedado con 2,5 millones de euros pertenecientes al jugador del Barcelona, según informó el abogado de la familia del capitán del seleccionado.

El Juzgado de Instrucción 9, a cargo de Javier Beltramone, dictó el auto procesamiento por el delito de estafa contra Rodolfo Héctor Schinocca, contador y master en economía “que era asesor de la familia Messi”, explicó a la agencia Télam Ricardo Eugenio Giusepponi, patrocinante de Jorge Messi, el padre de Lio.

El letrado indicó que través de una “ingeniería de sociedades off shore”, el contador Schinocca manejaba el dinero producido por contratos vinculados a la imagen y la publicidad del jugador, cuando aún era menor de edad, entre 2004 y 2006.

“Mediante ardides y engaños le hizo firmar a la madre de Lionel (Celia María Cuccittini) la sesión del 51 por ciento de las acciones de una empresa constituida en idioma inglés”, explicó Giusepponi.

Según dijo el abogado de la familia Messi, Schinocca constituyó dos sociedades off shore: Sport Consultants Limitada, “100 por ciento de la familia Messi“; y Sport Enterprises, en la que compartían en mitades iguales su paquete accionario.

Así, según el abogado de la familia Messi, el contador “incrementó los porcentajes en Enterprises, y se había apoderado del 62,5 del paquete accionario entre las dos sociedades”.

Giusepponi agregó que “mediante pruebas aportadas en la causa y testimonios, el juez Beltramone llegó a la conclusión de que el contador Schinocca había cometido el ilícito de estafa por abuso de confianza”.

Además, el magistrado rosarino le trabó al acusado un embargo por 5 millones de pesos. Las desavenencias entre Jorge Messi y su contador comenzaron en 2006, cuando la figura del astro futbolístico comenzó a producir dividendos por contratos de publicidad y uso de imagen, dijeron fuentes del caso.

El contador denunció en 2007 en la justicia de la Ciudad de Buenos Aires al padre de Lio -que en ese entonces tenía la patria potestad del menor- y la familia del jugador de Barcelona contraatacó con una demanda en Rosario, en ambos casos por defraudación.

La disputa de competencias llegó a la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que resolvió que los expedientes se unificaran y fueran instruidos en la justicia rosarina.

Miércoles, 30 de octubre de 2013