LA CIUDADANÍA COMO REHEN
Conflicto en Luz y Fuerza augura otro verano de cortes y servicio precario
Como sucede todos los años, el gremio conducido por Jorgen Ovando vuelve a ser noticia por las reiteradas pujas internas asociadas a la disconformidad obrera con la conducción sindical. Ante el creciente malestar de los trabajadores de la planta de Edison el oficialismo gremial optó por no verter opiniones en una clara demostración de inseguridad, producto del descontento generalizado de sus afiliados.
La falta de paz interna que desde hace años se vive en el sindicato de Luz y Fuerza retornó el pasado lunes luego que obreros de la planta Edison , ubicada en la Costanera General San Martín salieron a denunciar sanciones, producto de una supuesta persecución ideológica por parte del oficialismo sindical.
Así las cosas, ni el secretario general Jorge Ovando ni sus voceros hicieron declaraciones sobre un tema que siempre termina con las mismas consecuencias: interrupción del servicio, falta de mantención en las prestaciones y hasta sabotajes en medio de las altas temperaturas.
A saber, la estrecha cercanía de Ovando con la intervención de la Dpec y el gobierno provincial es algo que no ha caído muy buen en muchos empleados que desde hace años exigen actualizaciones salariales, mejores condiciones laborales y pago de adicionales.
“Ovando quiere estar bien con Dios y con el diablo y eso no puede ser. Ahora no solo se dedica a minimizar nuestros pedidos sino además persigue a los que estamos contra su forma de gestionar y representar a los empleados” expresó Mario Ceballos, uno de los trabajadores afectados por la sanción,
El tiempo dirá: mientras sigue el conflicto en Luz y Fuerza el resto de la ciudadanía no puede menos que esperar una pronta solución ya que siempre termina siendo el “pato de la boda”.
Jueves, 10 de octubre de 2013
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