PARO
Provincias se quedaron sin vuelos, pero el impacto del paro de transporte fue bajo
La medida de fuerza de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte no afectó el comercio ni las clases. La cancelación casi absoluta de los aéreos fue lo más significativo, además de problemas en la recolección de residuos.
El paro de 24 horas de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) y de la Unión General de Asociaciones de Trabajadores del Transporte (UGATT) tuvo bajo impacto en las provincias. Se hizo sentir en la cancelación de vuelos, en la recolección de residuos en algunas capitales, en el abastecimiento de productos para supermercados y en la reposición de efectivo a los bancos con los camiones de caudales, pero las actividades comerciales y las clases se desarrollaron con normalidad.
Lo más importante fue el alto acatamiento en el ámbito aeronáutico, por lo que casi no hubo vuelos hacia el Norte Grande y la Región Centro desde la Capital Federal. La medida de fuerza se hizo sentir en Aerolíneas Argentinas e Intercargo, GOL, Latam y Copa, y solo hubo mínimos servicios de FlyBondi y JetSmart. En el caso de Tucumán, se cancelaron 16 vuelos, mientras que 8 para Salta y fue imposible volar hacia Iguazú y Mendoza, entre otras provincias.
El impacto del paro de transporte en las provincias En Mendoza, el secretario general del sindicato de Camioneros, Ricardo Letard, informó que el acatamiento fue 100%, que muchos transportes "directamente no salieron a las rutas" y no hubo recolección de residuos en la capital provincial. Se esperaba que los ampleados de la Aduana adhieran a la protesta pero no sucedió y la actividad en la frontera fue normal. Sí hubo demoras en la carga de dinero en efectivo en los bancos por la adhesión del gremio de los conductores de camiones de caudales.
En el caso de Santa Fe, el paro nacional tuvo dos puntos de concentración, en Rosario y en la Estación Belgrano, en la capital. En la intersección rosarina de la avenida Circunvalación y Presidente Perón, hubo una multitudinaria asamblea de los gremios del transporte, inclusive los aeronáuticos, que bloquearon el paso de vehículos cada media hora y se hizo una olla popular. Esta actividad se extendió hasta las 17. En la Estación Belgrano se concentraron gremios estatales de distintas reparticiones, de la educación y universitarios, por lo que el tránsito estuvo interrumpido durante varias horas.
En relación al Túnel Subfluvial que une Santa Fe y Entre Ríos, hubo demoras por cortes intermitentes cada 10 minutos debido a una movilización de estudiantes, docentes y trabajadores provinciales. La circulación fluvial no se paralizó del todo pero sí hubo una disminución que se hizo sentir, de acuerdo a los gremios del sector.
En todos los casos, las consignas de los manifestantes iban desde el rechazo al desfinanciamiento de las universidades públicas, el bajo sueldo de los profesores, investigadores y no docentes, hasta el repudio a la privatización de Aerolíneas Argentinas y del Belgrano Cargas, dos empresas que son estratégicas en el sector del transporte. Aunque no hubo desabastecimiento, en algunas estaciones de servicios hubo demoras en la reposición de combustibles líquidos porque los choferes de los camiones cisternas se plegaron a los reclamos.
La baja presencia de trenes de pasajeros en las provincias hizo casi invisible el reclamo del sector, que tampoco contó con la adhesión de la Unión Ferroviaria pese a que su titular, Sergio Sasia, preside la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte, organizadora del paro. Se cree que por esta postura podría ser desplazado en las próximas semanas.
Choferes y recolección En Salta, la medida paralizó la formación que une a la ciudad de Güemes con la capital provincial, mientras que en Córdoba tampoco funcionó el tren que tiene servicios hacia las Sierras. El transporte de cargas no se vio afectado en un 100% pero sí se registraron demoras en algunos recorridos, se indicó.
En algunas capitales, como en Salta, Jujuy y Tucumán, la recolección de residuos está cargo de empresas privadas, cuyos choferes de camiones adhirieron al reclamo y no trabajaron. Las administraciones municipales pidieron a los vecinos que prorroguen por un día sacar los residuos pero, de todos modos, pusieron en marcha operativos de emergencia con móviles y empleados propios.
Como el gremio de choferes de ómnibus no adhirió al paro, solo se resintió el servicio interurbano en Córdoba, la actividad comercial y de clases se desarrolló con normalidad, por lo que la medida de fuerza no tuvo el impacto que sí se hizo sentir en la CABA y en la Provincia de Buenos Aires.
La fragmentación de la CGT no hizo posible que el paro se generalice, aunque sí hubo acciones escalonadas de algunos gremios, como los educativos que piden que sus reclamos sean escuchados e incorporados en el debate del Presupuesto 2025, en el Congreso de la Nación.
Miércoles, 30 de octubre de 2024
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