"Todos (incluidos los sumilleres) tuvieron que aprender los procedimientos adecuados y la etiqueta en tan solo unas horas", confesó el joven que lideró la broma.

Un grupo de jóvenes creó un restaurante ficticio en Nueva York, llegando a obtener más de 900 reservas, por lo que decidieron llevar su broma hasta el final y ofrecer sus servicios por una noche.

"Ninguno de nosotros había trabajado antes en un restaurante", escribió Mehran Jalali el pasado martes en la red X (antes Twitter), a quien se le atribuye el nombre del establecimiento 'fantasma'.

Según el joven, de 21 años, la 'prank' comenzó en 2021 cuando cocinó filetes para la gente en su vivienda en Nueva York. Así, uno de sus amigos registró el lugar en Google Maps con el nombre de Mehran's Steak House, y todas sus amistades escribieron buenas reseñas.

Posteriormente, crearon un sitio web para continuar con la broma, en el que instaban a los usuarios a dejar sus datos para reservar, alegando que el lugar no contaba con mesas disponibles por varios meses.



"Producción teatral"

Los jóvenes decidieron abrir las puertas al público el pasado 23 de septiembre en una "ubicación secreta". Para esto, llamaron a los que estaban en la lista de espera, y alrededor de 140 personas reservaron mesas.

El día del evento, al que asistieron personas de otros países como Canadá, México, Irán, en la entrada del lugar se podía observar una selección de fotografías que mostraban al 'chef Mehran' posando con celebridades para las que presuntamente había cocinado durante muchos años, incluido Albert Einstein, Marilyn Monroe, Barack Obama, entre otros, reporta un periodista de New York Post que acudió a la cena.

Otro episodio escenificado, que alertó a varios de los presentes, fue una propuesta de matrimonio a una camarera. "Parece más una producción teatral que una cena", dijo el gerente de marca de la cervecería estadounidense Sixpoint Brewery, Kyle Hertzog, citado por The New York Times, al observar a un sumiller luchando por abrir una botella de vino y hacer algunos cálculos básicos sobre los precios y la cantidad de empleados.

"Todos (incluidos los sumilleres) tuvieron que aprender los procedimientos adecuados y la etiqueta en tan solo unas horas", confesó Jalali, y agregó que más de 60 amigos lo ayudaron a llevar a cabo la cena.

De acuerdo con el medio, las reacciones a la comida se dividieron en partes iguales. Algunos comensales elogiaron el bistec, pero otros devolvieron el suyo.

Martes, 3 de octubre de 2023