El técnico de Textil Mandiyú tuvo el accidente a la altura del kilometro 208 de la autopista en jurisdicción de Ramallo. El hecho tuvo como protagonistas a dos automóviles Peugeot 207, en uno de los cuales se trasladaba el reconocido ex futbolista con su su hijo.

La información recogida da cuenta que ambos vehículo se trasladaban en sentido Capital Federal-Rosario, en circunstancias que el automóvil conducido por Toresani habría impactado en la parte trasera del otro rodado. A raíz de ello ambos vehículos terminaron fuera de la cinta asfáltica y con sus estructuras con roturas de importancia.

Al cierre de la presente edición los tres ocupantes del otro automóvil, un hombre y dos mujeres oriundos de la provincia de Córdoba, que regresaban de Capital Federal, estaban prestando declaración en sede policial y no habían sufrido ningún tipo de lesiones.

En tanto que Toresani sufrió golpes de diversa consideración, pero nada de gravedad, según la información entregada en sede policial, y su hijo solo escoriaciones. En principio, la médica que lo atendió en el lugar señaló que tendría una fractura de brazo.

Su lucha

Julio Cesar Toresani, ex jugador de River Plate, Boca Juniors, Racing, Independiente y muchos otros clubes del futbol argentino, fue hasta fin del año pasado entrenador de Textil Mandiyu de Corrientes, participante del Torneo Argentino B, pero a fines del año pasado le tocó jugar su partido más difícil: un cáncer del tipo linfoma no-Hodking, que afecta a los ganglios linfáticos.

A partir de allí comenzó una férrea lucha contra la enfermedad y hace un par de semanas atrás contó la experiencia en los medios nacionales:” Por suerte la enfermedad no estaba avanzada y tenía altas chances de curarme, pero al principio pensé que mi vida se acababa a los 45 años. Se te vienen muchas cosas a la cabeza. Al principio me agarró el bajón, estaba mal anímicamente.

Me encerraba en la habitación o el baño a llorar para que no me vieran mis hijos. Me propuse seguir adelante y nunca bajar los brazos. Hice una vida normal, más allá de que no me sentía bien. Pero gracias a Dios estoy fuerte y totalmente curado". Sin dudas que después de esta lucha este accidente va a quedar solo en una anécdota.


Domingo, 16 de junio de 2013