Se trata de un joven que cursó los casi dos años de instrucción en la Escuela de Suboficiales de la fuerza correntina. En 2011 presentó un certificado de estudios secundarios que nunca finalizó. Recién ahora lo descubrieron. El año pasado hubo casos similares.

Un joven de 20 años que estaba a un mes de recibirse como cabo de la Policía de Corrientes fue dado de baja ayer cuando autoridades de la carrera descubrieron que falsificó un título secundario.
Tras casi dos años de instrucción en la Escuela de Suboficiales Juan Bautista Cabral, el aspirante a un lugar en las filas de la fuerza de seguridad fue notificado de su baja inmediata. Además, ahora se encuentra imputado en una causa caratulada como supuesta falsificación de documentación pública.

Responsables de la Dirección de Institutos Policiales comprobaron esta semana que el certificado analítico de estudios secundarios presentado en el año 2011 por el involucrado era totalmente “trucho”.

El documento, uno de los principales requisitos para acceder a un lugar en la Policía, figuraba como expedido por las autoridades de un establecimiento educativo de la localidad de Jardín América, provincia de Misiones.

El muchacho en cuestión presentó el certificado supuestamente original como también dos fotocopias, a simple vista certificadas como corresponde.
Durante todo este tiempo, el joven cursó la carrera sin que nadie advirtiera la irregularidad. Sin embargo, a muy pocas semanas de finalizar la etapa de instrucción salió a la luz que en realidad quien iba a ser un policía más en las calles nunca finalizó el secundario, sino que apenas había completado hasta el segundo año y con un promedio bastante escaso.

El fraude fue corroborado con un pedido de informes a la escuela misionera, desde donde negaron que la persona en cuestión haya terminado sus estudios en dicha institución.

“Puede decirse que si bien en primera instancia no quedó en evidencia lo anormal de la situación en otra etapa del control de legajos sí pudo advertirse no sólo el incumplimiento de un requisito fundamental, sino la existencia de un delito como lo es la falsificación de un documento de uso público”, indicó a un diario local una fuente de la institución de seguridad.

No sólo que el frustrado policía no cumplirá con su meta sino que ocupó un lugar que bien pudo pertenecer a otro interesado.

Ya en el transcurso de 2012 se produjeron al menos cuatro casos similares e inclusive rechazaron a una persona que presuntamente contaba con antecedentes delictivos y pretendía ser integrante de la Policía.

Viernes, 14 de junio de 2013