FUERTES REACCIONES
Colombia retrocede con la OTAN
El gobierno de Colombia aclaró ayer que está interesado en ser socio y no miembro de la OTAN y trató de minimizar la ola de indignación que despertaron las afirmaciones del presidente Juan Manuel Santos, cuando el sábado dijo que a fin de mes podría quedar concretado el primer paso de la incorporación a la alianza que integran las grandes potencias militares del mundo. El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, encargado de salir a apagar el incendio, admitió que las críticas se originaron en "un problema de precisión" de parte de Santos.
"Colombia no puede y no quiere ingresar a la OTAN", dijo Pinzón al explicar que el propósito del gobierno "es de recorrer el camino para ser un socio en la cooperación, como lo son ahora Australia, Nueva Zelanda y Japón, entre otros países". En realidad, Colombia no puede pretender un ingreso a la alianza simplemente porque los documentos fundacionales de la OTAN exigen una pertenencia territorial que el país sudamericano no tiene. Así se lo hizo saber al gobierno el alto mando de la organización. En medio de las críticas y acusaciones lanzadas por los gobiernos de Bolivia, Venezuela y Nicaragua, Estados Unidos salió a apoyar a Colombia "como miembro capaz y fuerte en su acercamiento a muchas organizaciones multilaterales, como por ejemplo la OTAN". De todas maneras, los voceros de la OTAN en Bruselas dijeron que el acuerdo que se prepara y sería firmado a finales de mes "permitiría el intercambio de información clasificada entre la Alianza y Colombia", pero solamente eso. Pinzón explicó que el acuerdo estará basado en el "aprendizaje de Colombia en materia de Derechos Humanos y justicia militar y no contempla la posibilidad de recibir tropas extranjeras o darles acceso a bases militares". Con este acuerdo, dijo, se busca beneficiarse de una supuesta cooperación externa para el caso de que el diálogo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) finalice con un acuerdo que le ponga fin a la guerra interna. Después de los dichos ahora desmentidos de Santos, los presidentes de Bolivia y Venezuela habían pedido al secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), el venezolano Alí Rodríguez, que convocara a una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad del bloque. La solicitud quedó ahora sin efecto. «
Miércoles, 5 de junio de 2013
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