JUICIO EN TRIBUNAL ORAL DE PASO DE LOS LIBRES
Enjuiciado por esposar y abandonar a su hijo
En noviembre del 2019, Juan Aubel logró escapar de la casa en la cual vivía junto a su padre, en la localidad de Paso de los Libres. Estaba esposado en un estado de abandono generalizado. Su progenitor, Hualberto Aubel de 60 años, fue imputado de los delitos de "abandono de persona agravada de un padre hacia el hijo, por el resultado de un grave daño en el cuerpo de la víctima, en concurso real con privación ilegítima de la libertad agravada".
En la ronda de testimoniales se tenía previsto contar con la declaración de Aubel (hijo); sin embargo, un informe psicológico del hospital de salud mental, San Francisco de Asís, en el que el joven fue internado desde el momento que logró escapar de su casa, determinó que "la víctima no está en condiciones de declarar en el juicio.
El Tribunal presidido por Marcelo Fleitas, acompañado por Marcelo Pardo y Gustavo Ifran, asistidos por el letrado José Monti, dio a conocer en la última audiencia sobre el informe psicológico del denunciante, solicitado por el fiscal de juicio Noelia Lena.
En la última audiencia declararon dos testigos, un vecino de la familia Aubel y la pareja del acusado, cuyos testimonios se darán a conocer tras la finalización de la etapa de presentación de pruebas, explicaron en el portal de noticias confirmado.com
Por su parte, la defensa del imputado pidió una inspección ocular en el lugar del hecho denunciado, con fecha a determinar, solicitud aceptada por la Fiscalía y el Asesor de Incapaces.
En la próxima audiencia, prevista para el 30 de agosto, declararán testigos propuestos por la Fiscalía.
El hecho Vale recordar que desde septiembre de 2019 en la localidad de La Cruz, Juan Hualberto Aubel (padre) puso, según la denuncia de fiscalía, en situación de desamparo a su hijo Juan Leonardo Aubel, quien padece de esquizofrenia, siendo este incapaz de valerse por sí mismo y al que debía cuidar, colocándolo en una situación de desamparo, al tenerlo encerrado bajo llave, en una habitación de la vivienda.
Tenía, según denuncia, las manos esposadas delante de su cuerpo sin mínimas condiciones de higiene y ventilación, de cuidados y curación respectiva. La víctima logró escapar del domicilio, el 10 de noviembre de ese año y fue hacia la casa de su hermana, María, quien le prestó ayuda necesaria.
Miércoles, 24 de agosto de 2022
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