INSÓLITO
No tiene trabajo pero cría a su hijo como millonario: chupetes de oro y baños de leche y miel
Una mujer se volvió famosa por privarse de comprarse lo elemental para ella con tal de que su hijo tenga todo lo mejor: hasta un chupete de oro.
Cuando llega un bebé a una familia, los gastos se multiplican: pañales, ropa, y otras cosas hacen que el presupuesto varíe notablemente. Pero no hay manera de llegara fin de mes si le compramos al bebé un chupete de oro.
Sin embargo, una mujer británica ha decidido darle todo lo mejor a su hijo, y no repara en gastos: ha dejado de comprarse cosas caras para ella, pero gasta una fortuna en su hijo. Kasey Akram, de 32 años, es madre primeriza, y no trabaja para dedicarse enteramente a su bebé.
Y aunque no tiene empleo, se las arregla para comprar todo lo más caro, y hasta gastar en cosas que su hijo ni siquiera puede apreciar, como un chupete de oro. La mujer, que vive en el Reino Unido, está obsesionada con su hijo y lo admite sin problemas: “Tan pronto como tuve a mi hijo pequeño, mi obsesión cambió de cómo me veía yo a centrarme en mi hijo”.
Incluso se ha separado del padre de la criatura por no llegar a ponerse de acuerdo en la crianza del bebé. A la madre le molestaba que su pareja hiciera ruido cuando llegaba por la noche, y despertara al bebé.
“Es el niño más encantador del mundo”, dice orgullosa Kasey. “Me he peleado con amigos por cuánto he gastado en él. Compro mi ropa en galpones, de intercambio o con descuento para poder gastar todo en mi hijo”, afirma la madre. Y agrega: “No exagero, pero si tuviera la opción caminaría desnuda para que él pudiera usar lo mejor de lo mejor”.
Kasey era bailarina y modelo, y dejó todo para dedicarse exclusivamente a la maternidad, aunque admite que hast aque nació su hijo, no estaba muy interesada en ser madre. Pero al quedar embarazada todo su sentir cambió y decidió dedicarle toda su vida.
El nene no solo usa un chupete de oro: también lo lleva colgado de una cadena y tiene una pulsera ambos de oro con brillantes. Y a la hora del baño, no deja que el agua toque su piel: usa leche y miel.
Pero no le alcanza con darle lo mejor: además hace grandes sacrificios,. Cuando se le rompió l a cama, comenzó a dormir en el suelo, pero al bebé le compró una cama-tractor de 350 dólares. Ella usa calzado de oferta, pero le compra zapatillas Gucci.
“Su papá siempre dice que cuando cumpla 18 años tendrá novia y se mudará”, comenta la mujer. “Pero yo digo que no, que tendremos literas cuando sea demasiado mayor para compartir cama conmigo”, asegura.
Martes, 19 de julio de 2022
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