Según los datos oficiales, en los primeros tres meses del 2022 el país compró por 5.016.186 millones de kilos y vendió por 5.332.796. A la par, el consumo interno supera sus mejores números y es el más alto desde 2018.

La yerba mate atraviesa por un fenómeno impensado hace cuatro años atrás, pero al mismo tiempo coherente con la actualidad del sector, donde los productores hace tiempo vienen advirtiendo por la pérdida de competitividad y reclamando medidas a Nación para no perder mercados internacionales.

La importación crece y la exportación, por lo contrario, cae. Con esa tendencia arrancó la yerba mate argentina el 2022, mientras que a la par el consumo interno continúa en aumento y marca nuevo récords.

Los datos oficiales del Instituto de la Yerba Mate (INYM) dan cuenta que, entre los meses de enero, febrero y marzo, primer trimestre del 2022, se exportaron 5.332.796 kilos de yerba, lo que representa una caída del 30% en comparación con el 2021 cuando fue de 7.698.505. También es la cifra más baja en cuatro años teniendo en cuanta que 2019 las ventas al exterior en ese período fueron de 8.843.795, en 2019 de 6.606.991 y en 2018 de 9.563.697.

Mientras tanto, la importación de yerba mate inició el primer trimestre a la par de las exportaciones y casi empatando el número de ventas al exterior, algo insólito para un mercado que siempre se autoabasteció, pero en concordancia con lo que viene ocurriendo esta década. Según los datos del INDEC, Argentina compró yerba a Brasil y Paraguay por 5.016.186 millones de kilos y por un valor total que supera los siete millones y medios de dólares.

El sector productivo viene advirtiendo por la caída en las exportaciones. El "atraso cambiario" y los «altos costos de producción», entre otros factores, hacen que la yerba argentina pierda competitividad frente a los mercados de Brasil y Paraguay, según argumentan los productores yerbateros. Estos dos últimos países ofrecen la tonelada puesta en destino a US$1400 frente a los US$2200 de la Argentina, precisa una nota publicada en el Diario La Nación.

El productor ganadero y yerbatero Víctor Chamula, quien en diálogo con Misiones Online TV aseguró que hay empresas sirias que están apostando a la yerba paraguaya porque "es más barata". Siria es el país que mayor cantidad de yerba mate importa desde la Argentina con el 78, 4%. Luego se sitúan Chile con el 11,13 %; El Líbano con el 1,88 %; Estados Unidos el 1,62 % y Francia el 1,21%.

Mientras tanto, el aumento de las importaciones genera versiones cruzadas en el sector, por uno lado quienes señalan que se debe a la "escases" y por el otro los que alegan una cuestión pura y exclusiva de rentabilidad.

Los productores explican que el tipo de cambio oficial hace más conveniente importar a los grandes molinos. A finales de 2021, se estaba comprando yerba canchada en el exterior a un valor de 1,31 dólares, cifra que, en ese momento, equivaldría a unos $ 135 según el dólar oficial, mientras que la yerba mate argentina se estaba comercializando por arriba de los $ 160. Para los pequeños y medianos productores, la industria busca planchar el precio de la yerba local y recurren a importaciones de Paraguay y Brasil para reducir costos y maximizar ganancias.

A finales de marzo, productores yerbateros de Misiones y Corriente solicitaron que el Gobierno de la Tierra Colorada cobre un arancel a la importación de yerba desde Paraguay y Brasil y pidieron fortalecer los controles de ingreso de esa materia prima a la provincia.

Sin embargo, la industria yerbatera salió con fuerza desde comienzos de este año a advertir por un posible desabastecimiento en el país de esa materia prima, a raíz de la sequía y a proponer comprarla desde los países vecinos para evitar la faltante.

Las grandes firmas aseguran que la sequía histórica que sufrieron Misiones y Corrientes en el verano generaron una merma en la zafra gruesa de 2022 y ante este escenario, el sector empresarial adelantó que iba a tener que importar este insumo para abastecer el consumo local.

Martes, 24 de mayo de 2022