La ola de calor y la sequia devastó los cultivos en la zona de Goya. Lechugas, acelga, espinaca y rúcula son los productos que más padecen la temperatura. Se agravó que durante la noche no refrescara por lo que las plantas sufren el efecto las 24 horas. El productor Raúl Nicoletti describió la critica situación. A pesar del riego, la media sombra y los cuidados, los cultivos tuvieron graves pérdidas de tal manera que ni las vacas querían comer las lechugas que se echaron a perder.

La ola de calor que azotó al menos a gran parte de Corrientes generó diversos inconvenientes, no sólo en la salud de los habitantes sino también en algunas actividades productivas. El campo planteó inconvenientes en materia de cultivos. Si bien existen sistemas de riego por inundación o por aspersión no es lo mismo la reposición de humedad del suelo que causa la lluvia que el abastecimiento por riego artificial. Más allá de eso, que se pueden hacer los riegos en tiempo y forma, las temperaturas que hay generan vapor en las tierras que atraviesan las hojas del cultivo y van ‘quemando’, haciendo daño”,
En un contacto con el noticiero “Panorama Local”, que se emite por canal 2 de GigaRed, Nicoletti describió los efectivos demoledores que tuvo la pasada ola de calor y la sequia en la zona
Nicoletti señaló:”Está re mal la situación. Nosotros hacemos cultivo de verdura bajo cobertura plástica, pero con media sombra que ayuda a quitar gran parte del calor. Pero en enero nos castigó fuertísimo por las altas temperaturas. Fue tremendo el daño, sobre todo en las lechugas, todo lo que es acelga”.
“De acuerdo a lo que averigüé con los ingenieros agrónomos, el viento afectó muchísimo a los cultivos, esos vientos fuertes con el calor quemó a las plantas”, lamentó el productor.
LAS PERDIDAS
A pesar del riego, la media sombra y los cuidados, los cultivos tuvieron graves pérdidas de tal manera que ni las vacas querían comer las lechugas que se echaron a perder.
“En 25 días perdimos cerca de 700 kilos de lechuga que la tuvimos que tirar, era una lechuga lista para comercializar. Se secó. No hubo posibilidad de cortar antes. La lechuga desde que se planta hasta que se vende en un ciclo de 60 dias”, explicó el productor.
NI LAS VACAS COMIERON
“Todo se secó en 25 dias, fue algo increíble. Yo con mis 48 años de vida nunca he visto, se secaba y no sirve para vender porque la lechuga se vende por la hoja, tuve que tirar todo, ni para las vacas me sirvió, tampoco la comieron”, precisó.
LECHUGA NUEVA
"Ahora ha cambiado el clima en estos últimos 12 dias y estamos haciendo más lechuga. Le tenemos que dar un proceso de 15 dias para que llegue al final del ciclo, porque la que se fundió es la lechuga que estaba por venderse, la planta mas chica soportó el calor y dentro de 15 dias vamos a tener verdura para entrar al mercado. Otro inconveniente que tuvimos es con un vivero de la colonia, donde se quemaron las bandejas que estaban debajo del vivero. Entonces, nos quedamos sin plantines, ahora hay que esperar que esa plantita se recupere 15 dias para poder traer y plantarla, yo nunca he visto todo esto: más de 40 grados de temperatura pero en particular yo he visto que fue el viento lo que afectó”, comentó el productor.

Martes, 15 de febrero de 2022