LATINOAMÉRICA
Inteligente y joven: quién es Irina Karamanos, la primera dama de Chile
Se trata de una joven intelectual feminista, que sorprendió a muchos al aceptar ser primera dama de Chile. Es la pareja de Gabriel Boric, el izquierdista que ganó las presidenciales del vecino país. América Latina seguirá de cerca la gestión de esta pareja de jóvenes progresistas.
Es una joven intelectual feminista y, desde el 11 de marzo, a los 32 años, se convertirá en la primera dama de Chile. Pues es la pareja de Gabriel Boric, el izquierdista que ganó las presidenciales en el vecino país.
En primera instancia, al ser feminista, sorprendió que aceptara el cargo de "primera dama", pero ella ha dejado en claro que va a reinventar un cargo asociado a la cultura patriarcal contra la que ella ha luchado con vehemencia.
Irina será una de las primeras damas más jóvenes de Latinoamérica. Será también una de las que ostentará mayor preparación académica.
Cuando Irina Sabine Alicia Karamanos Adrián aceptó el cargo, ´generó toda una polémica, porque, justamente, va en contra de su activismo feminista.
Pertenece a familias alemanas y griegas. Además, tiene estudios de antropología, artes visuales y ciencias políticas y sociales y una sólida carrera como militante progresista. Irina es una de las fundadoras del partido Convergencia Social, parte de la coalición que llevó a Boric a ganar las elecciones.
Al respecto, un perfil sobre la chilena, muy interesante, ha sido elaborado por la periodista Cecilia Gonzáles, de la agencia Rt. Ella indica que Irina y Gabriel iniciaron una relación en 2019, "el año de las protestas estudiantiles que derivaron en un estallido social que cambió por completo la historia de Chile, ya que sumergió al país en un inédito proceso de transformación que renovó por completo la clase política, que le abrió la puerta al triunfo de Boric y que permitió que hoy 155 convencionales electos por el voto popular estén redactando una nueva Constitución que, además, será la primera a nivel mundial escrita por un órgano con paridad de género".
IRINA Y GABRIEL, CUANDO GANARON. (EL PAÍS) Así, durante la campaña, "la dirigente feminista mantuvo un rol discreto, más bien enfocada en la militancia de base. El protagonismo era por completo de Boric, quien dijo que, si ganaba, eliminaría el cargo de primera dama que, de cualquier forma, ni siquiera está regulado legalmente.
"No tiene ningún sentido, no puede haber cargos en el Estado que tengan que ver o estén relacionados con el parentesco del presidente o con nadie. Vamos a abolir esa institución y generaremos una instancia que sea transparente, en función de méritos y de carreras", había dicho el candidato. Los colectivos feministas estuvieron de acuerdo, pues tradicionalmente la posición de primera dama ha sido una figura protocolar y decorativa vinculada, en el mejor de los casos, a determinados programas sociales. Son "las esposas de", las que acompañan al hombre que ejerce el poder.
Sin embargo, con la victoria en la mano, el panorama cambió.
El futuro En diciembre, cuando Gabriel Boric ganó la segunda vuelta, las dudas sobre el futuro de su pareja estallaron de inmediato. Una opción era que imitara a Beatriz Gutiérrez Müller, la periodista, escritora y esposa de Andrés Manuel López Obrador que se convirtió en la primera mujer en renunciar a ejercer como primera dama en México.
No obstante, en Chile sucedió lo contrario. La semana pasada, Karamanos sorprendió al anunciar que finalmente sí asumirá como primera dama, pero advirtió que no implica hacer a un lado sus convicciones feministas.
"En su mensaje prometió reformular funciones y se comprometió a modernizarlo, a trabajar con una perspectiva de género alejada de los conservadurismos, a apoyar a las diversidades sexuales y de género. De manera inédita, incluso mencionó a las juventudes trans", explica la nota de Rt.
Irina reflexionó al respecto: "Es interesante que a través de ese cargo se pueda promover la articulación entre sectores, quizás incidir más en las organizaciones de la sociedad civil, incluir a la ciudadanía además de las fundaciones que ya cumplen un rol muy importante. Hay que rediseñarlo para asumir un lugar político distinto del espectro conservador que ve a la mujer en un rol de caridad, de acompañante, bajo una idea heterosexual del vínculo con el presidente".
Además, agregó que el cargo de primera dama debe "adaptarse a estos tiempos", lo que supone cambiar la relación con el poder político y la forma en que se percibe y valora a las mujeres que hacen política.
"Le vamos a dar un carácter más amplio a la visibilización de temáticas y de grupos, por ejemplo, las juventudes trans, infancia migrantes, también hablar de interculturalidad, el derecho de niños y niñas a hablar sus lenguas, hay distintos temas que podemos conectar combinando el trabajo de organizaciones y ministerios", aseguró Irina.
También recibió apoyos importantes:
En tanto, Gabriel Boric aún duda si mantener o no la figura de primera dama: "Nosotros hoy elegimos un camino, en una de esas nos equivocamos. Espero que no, porque confío en el criterio que tiene Irina con su equipo. Está trabajando con destacadas feministas y luchadoras sociales para darle una vuelta", dijo al reconocer que hablar del cargo de primera dama es "difícil y contradictorio", lo que le impide tener una respuesta definitiva.
Miércoles, 26 de enero de 2022
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