ECONOMÍA
Dólar, tasas y reservas: ¿Hasta cuándo seguirá el "veranito cambiario"?
Con una estacionalidad más favorable y un menor volumen de operaciones, aflojó la presión sobre las escasas reservas. Pese al mayor ritmo de crawling peg, decidió mantener la tasa de referencia en el 38%, por ahora.
El llamado “veranito cambiario” de diciembre empezó a dar un respiro a las escasas reservas del Banco Central después de un duro noviembre marcado por la estacionalidad desfavorable y tensiones propias del contexto electoral. Ayer, la entidad que preside Miguel Pesce hilvanó su cuarta jornada consecutiva sin venta de dólares en el mercado oficial al terminar la rueda con saldo neutro producto de su intervención. El alivio coincide con algunos factores propios del mes que mejoran el ingreso de divisas respecto del pozo de los meses previos y reducen la demanda de billetes verdes.
El saldo neutro de ayer fue la continuidad de un lunes en el que pudo comprar u$s5 millones, un martes también de resultado neutro y un miércoles con compras por unos u$s10 millones, según fuentes del mercado. Son pequeñas sumas pero que cortaron una seguidilla de ventas, que entre el 1 y el 10 de diciembre había implicado un drenaje de u$s384 millones. De hecho, desde mediados de octubre, cuando regía una restricción al pago anticipado de importaciones de insumos, el BCRA no acumulaba cuatro ruedas seguidas sin ventas.
dolar hoy: a cuanto cotiza este viernes 17 de diciembre Informate más Dólar hoy: a cuánto cotiza este viernes 17 de diciembre Ocurre en un mes en el que, después del habitual bache en el ingreso de divisas del campo entre septiembre y noviembre, la estacionalidad ofrece un respiro. Por un lado, comienza la cosecha fina, que en este año promete una importante afluencia de dólares por las exportaciones de trigo. Por otro, la mayor demanda de pesos propia de fin de año por parte de las empresas y las personas (a raíz del pago de aguinaldo, algunos impuestos, las compras navideñas y las vacaciones) descomprime la compra de divisas e incluso impulsa algún desarme de canutos.
Con todo, el respiro a las reservas coincide también con un retroceso en el volumen de operaciones en la plaza cambiaria oficial. Ayer, se transaron apenas u$s211 millones, una cuarta parte de las divisas comercializadas la semana pasada.
La mayor demanda de pesos fue también una de las razones por las que este mes todas las cotizaciones paralelas registraron un retroceso desde los picos alcanzados en noviembre. El contado con liquidación (CCL) acumula una baja del 7,5% hasta los $198,34 y el dólar MEP, un descenso del 4,5% hasta los $191,64. El blue, en tanto, cae en el mes $3 hasta los $198,50.
Aunque permanece en niveles muy elevados, en todos los casos la brecha perforó el 100% respecto de un tipo de cambio oficial que comenzó a acelerarse. Es que el veranito de diciembre coincidió con la decisión del BCRA de acelerar el ritmo de depreciación, como había adelantado Ámbito, para acercarlo de a poco a la tasa de inflación en el marco de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional. Entre mayo y noviembre, el dólar mayorista avanzó mensualmente apenas por encima del 1%, alrededor de dos puntos por debajo del índice de precios al consumidor mensual para intentar ayudar a desacelerar el alza del costo de vida. En lo que va de diciembre el ritmo casi se duplicó ya que en apenas 16 días acumuló un alza del 0,95%. Ayer cerró en $101,90.
Tasas Ante esta aceleración del crawling peg (depreciación administrada), el Central había comenzado analizar una suba de tasas que alineara ambas variables con la inflación, como confirmaron fuentes oficiales. En su comunicado posterior a las rees presenciales en Washington con una delegación del Ministerio de Economía y del BCRA, el FMI había pedido expresamente ir hacia una tasa real positiva. Ayer, el directorio de la autoridad monetaria discutió la posibilidad de un incremento del tipo de interés de referencia (que permanece estable desde hace 13 meses) a la luz del IPC de noviembre, que desaceleró al 2,5%. Por el momento, decidió mantener la tasa en 38% nominal anual y 45,44% efectiva anual.
Con todo, la medida seguirá bajo análisis a futuro. En el mercado, distintas consultoras y operadores esperan que en enero se convalide un incremento de 3 puntos porcentuales.
El respiro cambiario de diciembre era ansiado en el equipo económico. Pese a que sus funcionarios siempre descartaron de plano un salto devaluatorio, la presión sobre las reservas de cara a un calendario de vencimientos imposible de afrontar para el país sí fue uno de los motores de la decisión oficial de acelerar la negociación con el Fondo. De hecho, la próxima semana se concretará el segundo pago de capital al organismo correspondiente a la deuda que tomó Mauricio Macri en 2018: serán cerca de u$s1.900 millones, alrededor de un tercio de las reservas netas de acuerdo a los cálculos privados. Aunque el Gobierno negocia que el acuerdo con el FMI incluya un reintegro de los casi u$s4.000 millones de principal pagados este año.
Pasado diciembre, vendrán meses más complejos en términos estacionales antes de que en marzo comience la época de mayor ingreso de divisas con la cosecha gruesa. Entretanto y mientras los plazos de negociación parecen estirarse, el Gobierno apunta a cerrar un entendimiento técnico con el Fondo para refinanciar la deuda u$s45.000 millones durante las próximas semanas, con una montaña de vencimientos que amenaza en el horizonte.
Viernes, 17 de diciembre de 2021
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