BUSCAN APOYO POLÍTICO AL RECLAMO CONTRA RESTRICCIÓN
La Mesa de Enlace pidió audiencias con gobernadores por exportación de carne
Los presidentes que integran la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias (Ceea) solicitaron ayer audiencias con gobernadores de ocho provincias, tras el encuentro mantenido con el presidente Alberto Fernández en el marco de la reapertura parcial de exportaciones de carne bovina.
Tras la apertura parcial de ventas externas, los ruralistas buscan apoyo y diálogo entre ocho mandatarios provinciales y ganaderos.
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Se trata de los mandatarios de Buenos Aires, Axel Kicillof; de La Pampa, Sergio Ziliotto; de Entre Ríos, Gustavo Bordet; de Santa Fe, Omar Perotti; de Corrientes, Gustavo Valdés; de Mendoza, Rodolfo Suárez; de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, y de Córdoba, Juan Schiaretti.
“Desde las entidades hemos expresado y ratificamos nuestro rechazo a los anuncios realizados por el Gobierno nacional en la Casa Rosada, ya que bregamos por la apertura total de las exportaciones”, indicaron los dirigentes del campo.
Además aclararon: “Si bien el diálogo es algo que siempre hemos propiciado desde la Ceea, nosotros no participamos en la elaboración de las medidas tomadas y no fuimos invitados a ninguna reunión previa de trabajo”.
“Coincidimos, por supuesto, en la preocupación ante la problemática social de los precios de los alimentos y la inflación que aquejan a nuestra economía, pero que, como reiteramos ayer, no es responsabilidad de los productores”, dijeron en un comunicado.
La audiencia con los gobernadores fue pedida de manera “urgente” para poder dialogar acerca de las necesidades y alternativas que tienen para seguir trabajando como productores y por los consumidores del país.
“Aguardamos una pronta respuesta, con el ánimo de evitar mayores problemas en un contexto económico y social tan delicado como el que nos toca transitar”, consignó la Comisión.
COSTOS
Desde el punto de vista de la entidad confederada, el Gobierno está aplicando “una mirada maniquea de la realidad”, porque acusa por la inflación al precio de la carne, cuando por el contrario, el valor del asado es una víctima del aumento del costo de vida que tiene que ver con diversos factores.
“El Gobierno sostiene un plan económico que genera falta de trabajo y caída del poder de compra de la sociedad, no sólo en el rubro alimentos sino en la totalidad de los bienes y servicios. No es el precio de la carne el que genera la inflación que nos complica desde hace décadas”, remarcó CRA.
En este contexto, enumeró que si continúan estas políticas, el resultado será “la descapitalización del sector, la pérdida de mercados y la consiguiente destrucción de toda la cadena cárnica”.
Para que eso no ocurra, la entidad advirtió que está dispuesta a tomar las medidas que sean necesarias. “Lamentamos ser llevados a una confrontación, pero es necesario poner en conocimiento general que los productores y sus entidades gremiales defenderán el derecho de trabajar, comerciar y percibir el precio justo de su producción”, resumió.
De todos modos, CRA afirmó que el campo “sigue dispuesto al diálogo”, pero puso una condición: “Se necesita que los gobernantes pongan punto final a su inoperancia y dejen de lado su prejuicio ideológico”.
EL PRECIO
En paralelo se conoció un informe de que el precio de la carne vacuna no se tomó descanso en mayo y tuvo un incremento promedio de 5,9%, tres veces y media más que el aumento del 1,7% que se registró en el pollo, lo que determinó que la brecha entre los dos productos alcanzara el máximo valor en lo que va de la Presidencia de Alberto Fernández.
El mes pasado se necesitó el valor de 3,79 kilos de pollo para comprar uno de asado, la mayor brecha desde enero de 2020, de acuerdo con el relevamiento del Centro de Economía Política Argentina (Cepa), basado en precios de mercado y del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva).
Los precios relevados por este organismo mostraron que los cortes económicos fueron los que lideraron los aumentos, con un 7,8%, contra un alza de 5,7% en los cortes caros y de 5,3% en los intermedios.
En términos interanuales, el Cepa resaltó que “la variación de precios nominales de la carne (+76,6%) se movió muy por encima de la variación de precios del período”, de 48,8% según el Indec. A la cabeza de los aumentos sobresalen cortes de alto consumo popular, como el asado (92,6%), matambre (80,2%) y vacío (84,6%).
El Cepa consideró que en el período de análisis no puede medirse la incidencia de la suspensión por treinta días de las exportaciones de carne en los precios internos, debido a que la medida abarcó sólo los últimos diez días del mes y, además, coincidió con el cese de comercialización dispuesto por las entidades.
El 5,9% de aumento de mayo fue superior al 3,5% registrado en abril, aunque se inscribe en las oscilaciones de los últimos meses, con extremos de 20,2% en diciembre de 2020 y 0,5% en febrero de este año, aunque siempre dentro de la tendencia alcista ininterrumpida desde junio del año pasado.
Con las excepciones de marzo y abril de 2020, la brecha entre el precio del kilo de asado (utilizado como referencia por el Cepa) y el de pollo siempre fue superior a 3, pero desde febrero de este año la diferencia no hizo más que incrementarse, al compás de subas mayores por parte de los cortes vacunos. De una brecha de 3,44 kilos de pollo por cada kilo de asado que hubo en febrero, se pasó a 3,54 en marzo, 3,66 en abril y 3,79 en mayo, el mayor nivel desde que Alberto Fernández asumió la Presidencia.
Viernes, 25 de junio de 2021
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