El juez en lo Civil y Comercial N° 2 de Goya, doctor Gabriel Guillermo Saade, hizo lugar a una medida de no innovar, inaudita parte, solicitada por un cliente del Banco Galicia que aseguró ser víctima de una estafa, ya que se le otorgó un crédito de más de 87 mil pesos que nunca solicitó. Además, del total, se transfirieron 56 mil pesos a una cuenta que no conocía.

La Justicia hizo lugar a la medida de no innovar a favor de un usuario que afirmó ser víctima de phishing. A través de su homebanking se le otorgó un crédito de más de 87 mil pesos y se transfirieron 56 mil a una cuenta que desconocía.
Medida. El banco no podrá aplicar ningún descuento por el pago del supuesto crédito por el término de tres meses corridos.


A pesar de realizar la denuncia en sede policial y ante el banco personalmente, días más tarde, la institución envió un mail informando que se le descontaría la primera cuota.

Ante esa situación decidió reclamar judicialmente pidiendo que se dejara sin efecto el cobro de las mismas.

En este marco, el magistrado Gabriel Saade mediante resolución N° 182/21 le dio la razón, haciendo lugar a la medida cautelar de no innovar, inaudita parte, lo que significa que se debe cumplir con lo establecido sin previo traslado al banco.


El banco no podrá aplicar ningún descuento por el pago del supuesto crédito por el término de tres meses corridos.

Además, este plazo podrá ser prorrogado siempre que subsistan las circunstancias tenidas en cuenta para su admisión provisional.

Por ello no podrán debitar o retener de la cuenta de ahorros del cliente ninguna suma que tenga que ver con el crédito ni lo correspondiente a intereses.

También deberán abstenerse de realizar gestiones extrajudiciales o judiciales para el cobro de los mismos y de efectuar comunicaciones de calificación crediticia desfavorable al Bcra o a entidades privadas de bases de datos comerciales, bajo apercibimiento de aplicar astreintes.


El damnificado promovió una medida de nulidad e inexistencia de contrato de préstamo bancario.

Explicó que desde el 2010 tenía una cuenta de ahorro en el Banco Galicia y que desde la pandemia realizaba todas las operaciones bancarias por medios electrónicos, ya fuera mediante cajeros automáticos o desde un ordenador o celular smartphome por medio del sistema de homebanking.

El 10 de marzo de 2021 recibió en su correo electrónico un mensaje del banco, dirigido desde la dirección de correo electrónico seguridadbancogalicia@bancogalicia.com.ar por el que se le hacía saber que “Tu Clave Galicia ha sido bloqueada por cuestiones de seguridad debido a comportamiento irregular”.

Inmediatamente llamó al banco y habló con una empleada para informarle del mail recibido, quien al verificar la información le comunicó que había un préstamo a su nombre por la suma de $ 87.836 pesos. Y que de esa suma transfirieron 56.000 a otra cuenta que figura a nombre de un tercero.


Allí realizó la denuncia en sede policial y personalmente en la entidad crediticia, donde le informaron que se registró su reclamo.

Pero el 6 de abril recibió un mail donde le dijeron que le comenzarían a debitar lo correspondiente a la cuota del préstamo otorgado.

Como se considera víctima de una estafa, responsabilizó al banco por tener un sistema de seguridad endeble ante estos jaqueos y recurrió a la Justicia.

Phishing es el delito de engañar a las personas para que compartan información confidencial como contraseñas y números de tarjetas de crédito.


Es un término informático que distingue a un conjunto de técnicas que persiguen el engaño a una víctima, ganándose su confianza, haciéndose pasar por una persona, empresa o servicio de confianza (suplantación de identidad de tercero de confianza) para manipularla y hacer que realice acciones que no debería realizar, por ejemplo revelar información confidencial o hacer clic en un enlace, que es lo que habría sucedido en este caso.

Martes, 15 de junio de 2021