Con estupor e innumerables sensaciones encontradas conocimos y escuchamos el fallo del tribunal oral penal de Goya en el caso de Violencia de Género sobre la Sra. Gisela Dezorzi, quien estuvo a punto de perder su vida a raíz de la brutal golpiza propinada por su ex pareja, Cristian Casco.

El tribunal lo sobresee en las causas por daños y coacción y tan sólo lo condena a tres años de prisión por el cobarde ataque realizado por sorpresa y en horas nocturnas. Como producto del ataque la Sra. Dezorzi tuvo que ser internada y trasladada a la ciudad de Corrientes para ser intervenida a raíz de un neumotórax producido por la fisura de una costilla.

Desde su creación, nuestra organización MEDEHS se fijó como objetivo no solo la Memoria y la Verdad en sus más amplias connotaciones, sino también la Justicia como factor ordenador y constructor de las formas democráticas de la convivencia social. Fuimos conscientes en ese momento de las falencias del sistema judicial en Corrientes: jueces elegidos por negociaciones políticas sin que importe mucho su formación, jueces que abren el camino a sus hijos y parientes, jueces que son trasladados para hacerse cargo de causas que interesan al poder político, jueces que, en síntesis, a raíz del servicio que prestan al poder, se sienten impunes. Pero también es necesario aclarar que no nos referimos a la totalidad del cuerpo judicial, hay excepciones que por minoritarias no alcanzan a satisfacer los requerimientos de justicia del pueblo correntino. Al decir de la sapiencia popular: una golondrina no hace verano.

Las organizaciones de DD.HH de nuestra provincia somos testigos corpóreos de lo que denunciamos: las cárceles que visitamos están repletas de personas de extracción humilde, sobre las cuales cae todo el peso de la ley con sus máximas penas y no vemos ni un encarcelado perteneciente a los sectores medios o altos, generalmentente amparados por el poder político. Esos siempre zafan. Es lo que sucede en el caso Casco, cuya leve sentencia (que posibilita su excarcelación) ignora una clara y contundente legislación específica, obtenida gracias a las luchas feministas, que condena severamente la violencia contra la mujer, violencia que se agrava en la medida en que la justicia no brinda la protección necesaria y finaliza en el atroz crimen de FEMICIDIO con destrucción del núcleo familiar cuando hay hijos de por medio. No dudamos que esto estuvo a punto de suceder en el caso de Gisela Dezorzi y que la víctima salvó su vida por la comprometida acción de los profesionales de la salud pública, a los cuales les estamos profundamente agradecidos.

Señores jueces del tribunal oral penal de Goya y tribunales superiores, se aportaron todas las pruebas condenatorias en el caso Cristian Casco, hubo persistencia de sus actitudes acosadoras y machistas durante la tramitación de la causa, de alguna forma el poder judicial debe hacerse cargo del fallo de este fallo, revisar lo actuado, hacer Justicia y garantizar la integridad física de la víctima ante la inminente liberación del acusado Cristian Casco.

Como Organización en defensa de los DD.HH daremos a conocer esta grave situación a todos los organismos provinciales y Nacionales pertinentes, porque es hora de lograr tanto en Corrientes como en el país, una Justicia que funcione con la premisa de: ¡BASTA DE IMPUNIDAD!

COMISION DIRECTIVA DE MEDEHS GOYA

Martes, 30 de marzo de 2021