PREVENCION
Acidez estomacal: 8 consejos para evitar este problema frecuente
A la hora de hablar de malestares generales, hay uno del que no escapa casi nadie alguna vez en la vida: la acidez estomacal. Uno de cada cuatro adultos en Argentina vive en forma crónica con enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), a lo que comúnmente se le llama acidez, afección que se incrementó en las últimas dos décadas, entre otras causas, por el avance de la obesidad y factores vinculados al estilo de vida.
"El reflujo es un fenómeno fisiológico que sucede especialmente después de las comidas y durante un breve período de tiempo. Se puede presentar de una forma típica como es la sensación de ardor o quemazón en la zona de la boca del estómago, o a nivel del pecho o la garganta, o como una sensación de retorno del contenido que comimos y está en el estómago, hacia la boca, explica la Licenciada en Nutrición y Docente de la Universidad ISALUD Paola Hernández.
Y añade que "hay otros síntomas o signos de alarma que pueden ser: hemorragias gastrointestinales, vómitos persistentes, disfagia, anemias ferropénicas, pérdida de peso (sin que uno la esté buscando), o alguna tumoración que pueda palpar el médico".
¿Cuáles son los riesgos de no tratar la acidez en forma adecuada? "En general es una enfermedad benigna -responde Hernández-, aunque en algunas ocasiones su persistencia y la intensidad de los síntomas pueden interferir con la vida diaria. Es una molestia frecuente en la población en general, que puede ser causada por la presencia de una hernia de hiato, sobrepeso, mala alimentación, sedentarismo, algunos medicamentos que la producen y es muy común que se presente en mujeres durante el embarazo."
En el tratamiento del reflujo se usan medicamentos como antiácidos, bloqueadores de histaminas, inhibidores de la bomba de protones (omeprazol o pantoprazol), precisa la profesional.
No obstante, advierte que "abusar de esos fármacos genera un bloqueo en la primera línea de defensa a nivel digestivo y, a largo plazo, puede tener consecuencias como el sobrecrecimiento bacteriano a nivel intestinal. Es por eso que se aconseja siempre a mejorar los estilos de vida y reducir en lo posible el consumo de medicamentos, porque estos a la larga tienen un impacto negativo en la microbiota intestinal”.
Acidez, regurgitación y dificultades para tragar son los principales síntomas de la ERGE. Imagen ilustrativa/Archivo. En cuanto a cambios en la alimentación que pueden ayudar, Hernández compartió las siguientes recomendaciones:
✔Es importante la reducción del consumo de sal ya que esta aumenta el reflujo.
✔Disminuir las comidas ricas en grasas, ya que favorecen el aumento de peso y en consecuencia la presencia del reflujo.
✔Otra cuestión importante es reducir y/o moderar el consumo de bebidas carbonatadas porque aumenta el reflujo gastroesofágico que se produce al relajar el esfínter del esófago.
✔Los alimentos muy picantes dañan a la mucosa y hacen que esté más reactiva
✔Las bebidas alcohólicas y estimulantes como café o mate, también tienen una acción local a nivel de las células del estómago.
✔El chocolate y la menta tampoco son aconsejables en aquellas personas que sufren esta patología.
✔Las frituras, los alimentos muy tostados o con excesiva costra y el azúcar caramelizado también se suman a la lista de alimentos que se aconsejan limitar en el consumo diario.
✔Si bien antes se hablaba de alimentos como la cebolla o el ajo como causantes, al día de la fecha no está comprobado así que no se recomienda limitar su consumo para tratarlo.
"La consulta profesional y la adecuación del consumo de alimentos para cada momento, resulta clave en el tratamiento", concluyó Hernández, quien destacó la importancia de seleccionar en forma personalizada los alimentos de acuerdo a la tolerancia de cada persona y de la práctica de actividad física en forma regular.
Jueves, 17 de diciembre de 2020
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