Demonizados en demasiadas ocasiones por poseer un alto contenido en grasa, los frutos secos son una excelente fuente de fibra, ideal para regular el tránsito intestinal, así como de proteína y otros nutrientes, como los flavonoides muy beneficiosos para nuestro organismo.

Si los tomamos con moderación y siempre crudos o tostados y sin sal (nunca en las versiones fritas o incluso dulces como los recubiertos con chocolate o miel) nos aportan grasas, sí, pero de las buenas, esas que son indispensables para que el cuerpo funcione correctamente. También se pueden consumir en crema o “mantequilla” pero deberemos cerciorarnos que en la lista de ingredientes solo figure el fruto seco o, si acaso, una piza de sal. Hay que tener en cuenta que, si ingerimos frutos secos de esta manera, también tendremos que vigilar la cantidad, pues es muy fácil pasarse.

Las almendras y las nueces, por ejemplo, tienen mucho Omega 3 (ácido graso) y reducen el nivel de colesterol LDL (malo).

Por otro lado, diversos estudios apuntan a que introducir más frutos secos en una dieta saludable, como puede ser la mediterránea, podría proteger contra el deterioro cognitivo asociado a la edad, así como preservar la memoria.

Además, se cree que los flavonoides (antioxidantes) tienen efectos antiinflamatorios, anticancerígenos y protegen el corazón. Los científicos opinan que estos flavonoides inducen efectos neuroprotectores, lo que lleva a la neurogénesis o nacimiento de nuevas neuronas, además de mejorar el flujo sanguíneo al cerebro. Precisamente los frutos secos poseen altas concentraciones de estos antioxidantes.

Aunque, en general, los frutos secos consumidos de manera moderada, crudos o tostados y sin sal son muy beneficiosos para nuestra salud, estos son los 9 más saludables.

1. Almendras

Contienen mucho hierro y por tanto son recomendables para prevenir y combatir la anemia.

2. Pistachos

Su alto contenido en antioxidantes previene el daño celular.

3. Nueces

Son un gran alimento para nuestro cerebro.

4. Anacardos

Son perfectos para las embarazadas porque contienen hierro y ácido fólico.

5. Nueces pecanas

Su contenido en Omega 9 ayuda a disminuir el colesterol LDL (malo) y a aumentar el HDL (bueno).

6. Nueces de macadamia

Poseen mucho calcio y fósforo, perfectos para fortalecer huesos y dientes.

7. Nueces de Brasil

Pueden ayudar a mejorar el metabolismo de la hormona tiroidea.

8. Avellanas

Son muy nutritivas. 20 gramos proporcionan unas 130 calorías.

9. Cacahuetes

Ayudan a controlar el nivel de azúcar en sangre.

Si aun así prefieres decantarte por los frutos secos menos calóricos, te recomendamos elegir nueces, almendras, pistachos y avellanas.



Viernes, 20 de noviembre de 2020