EL PRESIDENTE DE BRASIL RECIBIÓ DURAS CRÍTICAS DE ENTIDADES DE LA SANIDAD
Jair Bolsonaro derogó un decreto que avanzaba hacia la privatización de la salud pública
En medio de fuertes críticas, el presidente Jair Bolsonaro revocó el decreto con el que apostaba a iniciar la privatización del sistema público de salud brasileño. En plena pandemia de coronavirus, que ya causó más de 158 mil muertos en el país, el decreto nº 10.530 buscaba concretar "alianzas con la iniciativa privada para la construcción, la modernización y la operación de unidades básicas de salud". Bolsonaro justificó el decreto frustrado en la falta de recursos para destinar a la salud pública, aunque no descartó que el proyecto vuelva a ser propuesto en el futuro.
El decreto nº 10.530 proponía concretar "alianzas con la iniciativa privada para la construcción, la modernización y la operación de unidades básicas de salud".
La polémica medida había sido tomada en el marco de la política oficial destinada a dar señales favorables al mercado financiero en medio de la crisis desatada por la covid-19. Las críticas de todas las entidades de salud nacionales no tardaron en llegar y fueron el detonante de la marcha atrás.
El anuncio de la revocación lo hizo el propio Bolsonaro en su cuenta de Facebook. En un mensaje titulado "El SUS (Sistema Único de Salud) y su falsa privatización", el presidente aseguró: "Actualmente contamos con más de 4 mil unidades básicas de salud y 168 unidades de atención de emergencias sin terminar". El argumento de Bolsonaro para proponer el fallido decreto fue una supuesta falta de recursos económicos "para completar las obras, adquirir equipos y contratar personal". Lejos de dar vuelta la página, el mandatario advirtió que "habiendo entendimiento futuro de los beneficios propuestos por el decreto, el mismo podría ser reeditado".
Gracias al decreto firmado por Bolsonaro y el ministro de Economía, Paulo Guedes, el SUS podía estar incluido dentro del Programa de Proyectos de Inversión (PPI). Se trata del plan de privatizaciones del gobierno que quedó trunco este año por la pandemia y la falta de apoyo mayoritario en el Congreso.
La iniciativa recibió duras críticas de entidades médicas que alertan sobre la "destrucción" del sistema público de salud. "Si bien se habla de proyectos piloto, todo se inicia así, es la puerta abierta para la destrucción del sistema único de salud", dijo el presidente de la Asociación Brasileña de Salud Colectiva, Gulnar Azevedo. En el mismo sentido se expresó el presidente del Consejo Nacional de Salud, Fernando Pigatto: "Siempre nos oponemos a cualquier tipo de privatización, retiro de derechos y debilitamiento del SUS. Seguiremos defendiendo la vida, la salud y la democracia",
Jueves, 29 de octubre de 2020
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