SALUD
Qué hacer si se tiene las defensas bajas
Se van acercando los meses del año en los que el sistema inmunitario está más débil. Como consecuencia de ello, es fácil de padecer todo tipo de virus respiratorios como la gripe o el catarro. Las defensas son claves en el organismo de toda persona, debido a que repelen las infecciones además de tratar enfermedades tan graves como el cáncer.
Cómo se sabe que las defensas están bajas Es importante el conocer en todo momento, si las defensas están demasiado bajas. El cansancio o la falta de energía durante el día, puede ser sintomático de que la personas tiene un sistema inmune algo débil. El padecer infecciones víricas de manera habitual, también hace indicar que la persona tiene las defensas bajas.
Hay mucha gente que piensa que un análisis de sangre, puede indicar si su sistema inmune está bajo. Ello se debe a que los glóbulos blancos y rojos no forman parte del sistema inmunitario.
La importancia de la inmunidad Mucha gente cree que un fármaco puede solucionar el problema que tiene con sus defensas y fortalecer el sistema inmunológico. Sin embargo, los expertos aconsejan el llevar unos buenos hábitos de vida para conseguir subir las defensas. Hay que saber en todo momento, el potenciar y darle la importancia que tiene a las propias defensas.
Una persona considerada sana, tiene muchas menos posibilidades de contagiarse que otra que sigue un estilo de vida mucho menos saludable y con todo tipo de excesos. La fuerza del sistema inmunitario depende en una gran medida del llevar una alimentación lo más sana y equilibrada posible y de hacer ejercicio físico de una manera regular.
Qué hacer para tener un sistema inmune fuerte Además de seguir una buena alimentación y hacer deporte de manera habitual, hay otra serie de hábitos que pueden ayudarte a tener las defensas altas:
La falta de descanso provoca que el sistema inmune se debilite más de la cuenta. Es aconsejable el descansar y el dormir al menos unas 7 u 8 horas al día para evitar una bajada importante de las defensas del cuerpo. Mucha gente lo desconoce pero las emociones forman parte del sistema inmunitario. Es por ello que es importante el tener siempre una actitud positiva ante la vida. Una persona con un alto nivel de estrés y de ansiedad tiene más posibilidades de contraer algún tipo de afección que otra que es feliz y se ríe de manera habitual. Desecha por tanto los pensamientos negativos de tu vida y piensa en positivo. Los diferentes tipos de defensas Cada célula que compone el sistema inmunitario tiene una función crucial a la hora de defender al organismo de posibles virus:
Los neutrófilos son las primeras defensas en aparecer, con el fin de eliminar a posibles virus que entran en el organismo. Los macrófagos se tragan a los virus y a las bacterias que suponen una amenaza para la salud. Los linfocitos de tipo B son los encargados de producir anticuerpos para eliminar a los invasores. Los linfocitos de tipo T participan en la producción de anticuerpos y ayudan a los macrófagos a eliminar a los diferentes virus. Las células dendríticas se encargan de reconocer a los invasores y de eliminarlos. Es clave por tanto que este tipo de células estén fuertes en todo momento ya que de esta manera, es más complicado y existe menos riesgo de contraer enfermedades. Unas defensas altas son claves a la hora de evitar afecciones tan habituales como los catarros o la gripe. Recuerda que en los meses otoñales e invernales las defensas son más propensas a disminuir y se vuelven más vulnerables que durante los meses de calor. Con la llegada del Covid-19 es importante también el tener un sistema inmunológico fuerte.
Miércoles, 28 de octubre de 2020
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