El Gobierno de Cataluña aprobó el cierre de bares y restaurantes, además de otras medidas restrictivas, durante 15 días para frenar el avance del coronavirus en la región. El Ejecutivo español, encabezado por Pedro Sánchez, ordenó a las comunidades tomar nuevas medidas de prevención por el rebrote del virus, mientras que en Madrid se oponen al cierre de actividades.

El comité del Plan de Emergencias de Protección Civil (Procicat) de Cataluña aprobó este miércoles el cierre de todos los bares y restaurantes de la comunidad durante 15 días. Además, se reducirá el aforo de los centros comerciales al 30 por ciento y el de los gimnasios al 50 por ciento para intentar contener el avance de la epidemia de covid-19.


Las nuevas restricciones también afectarán a deportistas y estudiantes de todos los niveles. Se suspenden por dos semanas las clases presenciales y las competiciones deportivas federales, escolares o privadas.

Los positivos en la comunidad pasaron de 7.000 a 11.000 semanales en pocos días. “Cataluña se halla al inicio de la segunda ola de covid-19", dijo Meritxell Budó, portavoz del gobierno local. Budó explicó que todavía no ven necesario declarar el estado de alarma en la región, pero que "el Govern no tendrá ningún problema en solicitar el estado de alarma" al Gobierno de Pedro Sánchez.

Entre martes y miércoles, Cataluña registró 1.620 nuevos contagios, 23 fallecidos y 40 nuevos hospitalizados, con lo que ya son en total 1.024 los pacientes con coronavirus ingresados, 189 de ellos en terapia intensiva. Así, igualan el número de pacientes en estado crítico que había en mayo.

Otro índice que preocupa al Ejecutivo catalán es que la tasa de reproducción (el R) alcanzó el 1,33. Por encima de 1, se considera que la epidemia está en expansión porque indica que un infectado del virus contagia a más de una persona.

La situación en Madrid

En Madrid, el vicepresidente regional, Ignacio Aguado, reconoció que “las navidades serán muy distintas de como las imaginamos si no reducimos los contagios”. En la comunidad se opusieron al cierre propuesto por el Gobierno de Sánchez, e incluso el Tribunal Supremo de Justicia de Madrid (TSJM) rechazó las medidas de restricciones a la movilidad por el coronavirus. El líder del Partido Popular, Pablo Casado, exigió a Sánchez, que “retire el estado de alarma en Madrid”.

Por su parte, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, defendió el estado de alarma y dijo: “El problema de Madrid son los datos. Miren a Europa y pongámonos juntos a solucionar los datos. Si estiman a España, no provoquen divisiones”.

Miércoles, 14 de octubre de 2020