La modelo realizó un sorteo para beneficiar a su marca a mediados de este año y la experiencia con el "ganador" del mismo los dejó en la justicia. Enterate que pasó.

Cuando se trata de acuerdos de palabra hoy en día nos tomamos de la película “Lo que el viento se llevó”. Sucede que, las redes sociales hoy son el nuevo “documento” moderno mediante el cual quedan sentados los acuerdos y es una cuerda un poco floja de equilibrar. Lo cierto es que el dicho “cuentas claras, amigos duraderos” no tiene fecha de vencimiento y así parece no haber sucedido entre Karina Jelinek y un curioso fan que no quiso pagarle $2000 de una rifa que sorteó a mediados del año.

Todo comenzó cuando a la modelo la empezó a golpear de cerca la inflación del país y ante el botón de “alerta” que apretó el bolsillo por la crisis económica, salió a reinventarse y buscar y una salida para su marca de lencería y bikinis. Para lograrlo lanzó un sorteo en su cuenta de Instagram que dejó más dudas que expectativas: “lo que estoy vendiendo es una orden de compra de $2,000 de productos de mis líneas cápsulas y a pedido de mis seguidores, con la compra participás de un sorteo para compartir un pre en mi casa conmigo, puede ser una chica o chico”.


Si bien se sabe que la técnica “sorteo” es el anzuelo más sólido que utilizan marcas y diseñadores independientes para vender sus productos y de paso ganar un poquito de seguidores, es una herramienta que no garantiza seguridad en varios casos. En este caso particular, el hombre de 36 años que ganó la propuesta de la cordobesa, se comportó de una forma confusa e irregular y los desentendidos terminaron en la Justicia. ¿Qué pasó? Se acercó al domicilio de Karina con los 2 mil pesos pero a último momento se habría arrepentido del plan, tomó la plata y huyó de la casa de la morocha en un Fiat 500.

El problema es que “ladrón que huye no puede dejar rastros” y se ve que el acreedor del beneficio de un encuentro con la autora de “lo dejo a tu criterio” no tuvo mucho en cuenta este tema, por lo que luego de arrepentirse y pegar la vuelta, agredió a dos empleados de seguridad y rompió la valla. En paralelo a su pequeña película de acción, la modelo estaba esperando de forma cálida a su seguidor, junto a dos amigas y un asadito en el barrio Cabos del Lago (Nordelta) donde reside Jelinek.

En medio del cuadro desafortunado las chicas salieron corriendo para tratar de frenarlo y dieron aviso a los guardias del sitio que lograron interceptar la huída y según relata la periodista Mercedes Ninci, la fiscal Laura Capra investiga esta situación que se dio el domingo 17 por la noche y desde la comisaría Milberg quedó imputado el sujeto por daños y perjuicios. Pero el mejor remate al caso lo dio el seguidor de Jelinek quien lanzó de forma insólita que se fue porque Karina no había querido tener sexo".


¿Moraleja? No dejes que la inflación bloquee tu zona racional: si no conocés a alguien detrás de la pantalla, no hagas acuerdos económicos. Mucho menos si vos sos el premio final.



Jueves, 21 de noviembre de 2019