El delantero uruguayo de River se quedó sin la definición por desgarrarse en la ida ante Tigres. Ahora, tres años después, tiene posibilidades de ser titular ante el Xeneize por las ausencias de Borré y Scocco.

Monterrey, 29 de julio de 2015. Tigres y River empataron 0-0 y los de Marcelo Gallardo se volvieron a la Argentina con un buen resultado de cara a la vuelta, una semana después en el Monumental. Pero no todas eran buenas noticias, ya que Rodrigo Mora se había desgarrado el isquiotibial izquierdo y eso lo privó de estar en la cancha en el 3-0 que consagró al Millonario en la Copa Libertadores.

Aquella noche lluviosa en Núñez lo reemplazó un tal Fernando Cavenaghi, que se retiró por la puerta grande. Sin embargo, ahora la historia podría darle una revancha al uruguayo, que tiene chances de ser titular en la definición del sábado ante Boca tras la suspensión de Rafael Santos Borré por acumulación de tarjetas amarillas y la lesión que dejó sin posibilidades a Ignacio Scocco.

Pasó mucha agua bajo el puente para Mora. Primero estuvo a punto de irse al Al-Nassr árabe, pero su pase se cayó. Después llegó algo mucho más grave e inesperado: en mayo de 2017, una necrosis en la cadera derecha estuvo a punto de obligarlo a retirarse del fútbol profesional, pero logró recuperarse y regresó al césped a principios de este año.

Claro que, de jugar, no sería la primera chance del charrúa de disputar una final ante Boca, ya que estuvo en la Supercopa que River le ganó por 2-0 a su eterno rival en Mendoza, el 14 de marzo pasado. Pero la Libertadores tiene un valor infinitamente más alto que aquella corona.

Si Gallardo opta por jugar con un acompañante para Lucas Pratto en la ofensiva, Mora tiene todos los números para convertirse en ese hombre. Muy querido por la hinchada, el uruguayo podría tener la oportunidad de su vida después de pasarla verdaderamente mal. ¿Será la revancha soñada?

Jueves, 22 de noviembre de 2018