Cuando de encender la pasión se trata, todos los trucos son válidos. Si te dejas llevar por la magia de la alcoba, puedes hacer que tú y tu pareja disfruten al máximo. Cada movimiento y toda nueva experiencia les permitirá recorrer los laberintos del placer y así lograr que cada encuentro sea especial para ambos.

Cuando la creatividad se hace presente en la intimidad de la pareja, existen algunos secretos que puedes tomar en cuenta para que tu encuentro sea inolvidable.

El papel que juegan los movimientos en la intimidad

Los ejercicios de Kegel

Son ejercicios que vienen a ejercer varias funciones, una de ellas y que hace al tema que nos convoca, es que contribuyen en el fortalecimiento de las paredes vaginales. Esto permite que tú y tu pareja puedan disfrutar mucho más de la intimidad. Lo que debes hacer es presionar varias veces de manera intermitente, los músculos de la vagina una vez que él te haya penetrado. Así tu pareja sentirá el mayor placer ante los movimientos que estará sintiendo.
Es apropiado destacar que, este tipo de ejercicios también cumplen una función muy importante en cuanto a la incontinencia urinaria, pues permite que la incontinencia ya no sea un inconveniente para ti si se los practica a diario con este fin.

Los movimiento de cadera

Seguramente recordarás los juegos que hacías con el aro en la cadera o en la cintura, alguna vez nos ha tocado a todas realizar alguna actividad física con ellos en la escuela primaria o secundaria. Trae a tu encuentro íntimo esos mismos movimientos, pero, con la diferencia de que en este caso deberán ser mucho más lentos y delicados. Así, con este movimiento circular y leve, tu pareja podrá alcanzar un mayor placer.

La importancia de rozarlo en varias partes del cuerpo

Debes tener en cuenta que para él es muy erotizante que tú lo roces con los labios de la vagina en cualquier parte del cuerpo. Puede que no lo creas, pero si lo intentas comprobarás que los toques suaves y delicados de tus partes al contacto directo con su piel serán capaz de despertar sus emociones y conducirlo a los terrenos del goce y el deleite.

Vaquera de frente o invertida

Es una posición que a ti te beneficia pues eres quien controla la situación y estás en el poder de dominar. Te sentirás cómoda pues tu abdomen estará bien ubicado y relajado y además eres quien lleva el ritmo y sabe cuándo ir más lento y cuando acelerar. En otro caso, y hablado de la misma postura, puedes ubicarte de espaldas a él.

Ubicados en una mesa

En esta postura, para experimentar otras superficies y lugares y que no sea solamente la cama, pueden ubicarse sobre una mesa, precisamente al borde, o si lo prefieren más cómodo, al borde mismo de la cama. Colócate boca para arriba y tu pareja debe colocarse de frente a ti.

Se suele recomendar para esta postura que la mujer se ponga una almohada bajo las nalgas de tal manera que, la cadera adquiera cierta elevación. El punto relevante de esta postura es que la penetración será desde un lugar más bien perpendicular lo cual permitirá un contacto con el clítoris que no precisamente sucede en otras posiciones. Esto le agrega un plus importante en el disfrute sexual.

Perrito

Como su nombre lo dice, se trata de la postura “perrito” que consiste en que tú te ubiques en cuatro puntos. Es una de las posturas más placenteras para la mujer pues, se sabe que es allí cuando se abre bastante el cuello uterino y es por este motivo que la penetración puede llegar a ser mucho más intensa y profunda. A su vez, en esta posición él tendrá el control de la situación y lo convierte en dominante.

Hay quienes aseguran que hacer todos los mejores esfuerzos en materia de sexo es tan importante como darlo todo por amor, cuando hablamos de una pareja estable y en un creciente proceso de construcción de una larga historia juntos. Recuerda que todo lo que tenga intervención en la intimidad con tu pareja debe basarse en un diálogo fluido. La confianza que ambos se tengan cuenta de verdad para que el camino del placer sea mucho más intenso.

Viernes, 15 de septiembre de 2017