EN EL PAÍS HAY 59 CASOS DENUNCIADOS
Curas abusadores, ni Reimer ni Pacheco fueron apartados de la Iglesia
Ambos están involucrados en casos de abusos sexuales durante sus actividades de clérigo. Algunos hechos fueron denunciados y en el caso del cura Domingo Pacheco ya hay un proceso judicial. Pero lo cierto es que los religiosos no fueron expulsados de la Iglesia, a pesar de las graves denuncias en su contra.
El párroco Fabián Reimer, quien fuera acusado de cometer reiterados abusos a menores en la diócesis santotomeña pero que nunca llegaron a la Justicia penal, no figura como expulsado por la Iglesia Católica en un informe nacional difundido en los últimos días con un listado de 59 sacerdotes denunciados por el mismo delito. Según datos recabados por la agencia Télam, en los últimos 15 años tan sólo tres religiosos fueron expulsados efectivamente por la Iglesia Católica tras haber cometido abusos sexuales.
Reimer, al igual que el cura Domingo Pacheco en Esquina, tuvo graves denuncias internas de ex monaguillos y de ex estudiantes de catecismo en los años 2009 y 2010, pero como las familias de los mismos eran muy allegadas a la Catedral, jamás se animaron a efectuar una denuncia penal y por ello la Justicia nunca intervino. A fines del año pasado la Iglesia emitió un comunicado confirmando que Reimer había sido apartado de las actividades de clérigo, pero la expulsión jamás sucedió y se desconoce su paradero. El informe difundido a nivel nacional demuestra lo poco que la Iglesia Católica realiza para colaborar con la Justicia en este tipo de delitos sexuales con curas involucrados. DENUNCIADOS En total son 59 los sacerdotes y tres monjas los denunciados en el país por hechos de abusos sexuales, pero sólo ocho de ellos recibieron una condena judicial. "La mayoría de los casos no son denunciados. La Iglesia no los denuncia, son las víctimas las que se animan a contar lo que les pasó y para ellas es un proceso muy doloroso. Estos números muestran la arbitrariedad del juicio canónico, porque salvo en casos que son indefendibles o han tenido mucha trascendencia pública, la expulsión no se concreta", explicó Carlos Lombardi, abogado de la Red de Sobrevivientes de Abuso Eclesiástico y uno de los pocos especialistas en derecho canónico del país que no pertenece a la Iglesia. En nuestro país no existen registros oficiales sobre la cantidad de sacerdotes o monjas denunciados. Tampoco hay registro de cuántas son las víctimas. Siguiendo las notas publicadas en medios nacionales y regionales, informes de agencias y consultando fuentes propias, Télam reconstruyó un mapa de la pedofilia dentro de la Iglesia utilizando el mismo mecanismo de La Casa del Encuentro, la ONG que lleva adelante el único registro nacional que existe sobre femicidio. Este mapa muestra que en la mayoría de los casos la Iglesia no acompañó a las víctimas, que los abusadores ya tenían antecedentes y que los traslados son la respuesta más frecuente ante una denuncia. "Hay distintos niveles de responsabilidad en los traslados. Esos distintos niveles y esa fragmentación y discrecionalidad conspiran contra la tolerancia cero y otras premisas del Papa sobre los abusos", reconoció el obispo Sergio Buenanueva, presidente de la comisión de Ministerios del Episcopado. Los casos de curas "trasladados" de una diócesis a otra, cuando sobre ellos pesan denuncias de abuso, no son episodios aislados. El caso Próvolo, uno de los más recientes, es una muestra clara del procedimiento que se da dentro de la Iglesia. SÓLO TRES EXPULSADOS Buenanueva, quien en 2011 fue designado para elaborar un protocolo a seguir ante denuncias de abuso, admitió que no sabe cuántos son los curas denunciados ni tampoco los condenados y sostuvo que hoy en la Iglesia "no existe criterio único". Todo depende de la orden a la que pertenezca el abusador, si ejerce o no como sacerdote. Y si es obispo, la investigación corre entonces por cuenta del Vaticano. Así, la superposición de responsabilidades puede terminar funcionando como una red de encubrimiento. En estos 15 años, sólo tres curas fueron sancionados con la expulsión del estado clerical, que implica que ya no pueden ejercer más el sacerdocio: Miguel Ángel Santurio (2013, condenado a 14 años por abuso sexual agravado contra 5 chicos), José Mercau y Cristian Gramlich (el papa Francisco fue quien ordenó la sanción contra ambos sacerdotes de San Isidro, pero la denuncia nunca fue llevada a la Justicia).
Viernes, 19 de mayo de 2017
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