Un nene de 4 años oriundo de la localidad de Curuzú Cuatiá, fue derivado de urgencia ayer a la tarde al hospital Juan Pablo II de la Capital correntina, tras ingerir una importante cantidad de veneno que habría confundido con una gaseosa.

Según indicaron fuentes cercanas a la familia, la víctima es un niño de nombre Guillermo (4), y habría tomado una fuerte dosis de Tipertok, un mosquicida que es utilizado para bañar vacas.
Al parecer el menor encontró el veneno en la casa de su abuela, que es con quien pasa mayor parte del tiempo porque su madre trabaja todo el día, el cual se hallaba dentro de un envase de gaseosa y lo ingirió en gran proporción.
Guillermo fue trasladado de urgencia al hospital de Monte Caseros donde recibió las primeras atenciones y luego se lo derivó a Corrientes para una mejor atención.
De acuerdo al último parte médico, el niño estaba fuera de peligro y su evolución era favorable.

Viernes, 22 de agosto de 2014