El clásico en la ciudad de Bitola terminó muy mal. Los hinchas del Vardar, conjunto visitante que se impuso 1-0 ante el Pelister, se enfrentó con la Policía, uno de los efectivos lanzó un explosivo al 'bulto' y, entre varios heridos, el peor sufrió la pérdida de su extremidad. Lo curioso es que el individuo hasta se tomó el tiempo de hablar por celular, pese a perder gran cantidad de sangre.

Episodios sangrientos hay en todo el mundo, más allá de que en Sudamérica se registren la mayoría a nivel fútbol. El Vardar, popular conjunto de Macedonia, tiene una de las barras más pesadas. Visitó el estadio Tumbe Kafe, situado en la ciudad de Bitola, donde lo esperaba el Pelister, su clásico rival. En cuanto a lo deportivo, hay que informar que triunfó la visita, aunque la nota de la jornada pasó por otro lado.

Los Komiti Skopje son acérrimos contrincantes del grupo de violentos del otro conjunto, denominados Bitola Ckembari. Los primeros enfrentamientos entre ambos datan de principios de la década del '90, aunque en esta ocasión, el grupo de choque fue contra la Policía. Según informaron los medios europeos, un efectivo lanzó una granada a la tribuna donde estaban apostados los simpatizantes del Vardar, lo que generó decenas de heridos.

De milagro no hubo muertos, aunque el que peor la sacó fue uno que perdió su mano, por causa de la explosión. Las imágenes son fortísimas y se ve cómo su extremidad queda casi despedazada. Al mismo tiempo, llama la atención cómo habla por celular sin exigir socorro.