Estaban en una esquina y los vecinos, cansados, llamaron a la Policía. Un rato antes trataron de romper las ventanillas de un par de autos. También demoraron a un joven que caminaba con un cuchillo en la cintura.

Los oficiales de un patrullero de la Capital, arrestaron el martes a dos jóvenes que al parecer pretendían cobrarles el paso a los vecinos del barrio Patono. Ambos estaban bajo los efectos de una importante cantidad de alcohol y minutos antes, habían intentado violentar algunos autos estacionados. Cuando vieron a los policías intentaron correr, pero los alcanzaron.

La detención se produjo cerca de las diez, después de que varios vecinos se quejaron al 911 por las molestias que provocaban dos desconocidos que estaban en una de las esquinas del barrio. En los llamados repetían a los efectivos que ambas personas se habían instalado en el lugar y amenazaban a las personas que pasaban cerca, exigiéndoles dinero.

De inmediato y gracias a la radio policial, los agentes del patrullero fueron puestos sobre aviso y llegaron de inmediato a la intersección, donde los desconocidos continuaban provocando disturbios. Cuando el móvil se acercó, los sospechosos corrieron en diferentes direcciones, pero los oficiales les dieron alcance y tras un breve forcejeo los inmovilizaron y lograron subirlos a la camioneta para llevarlos a la Comisaría.

Durante el procedimiento los oficiales reconocieron a ambos jóvenes porque unas horas antes, los habían puesto en fuga tras descubrirlos merodeando y tratando de romper las ventanillas de un par de automóviles estacionados en las inmediaciones. Resultaron tener 19 y 20 años y ambos quedaron detenidos en la seccional jurisdiccional.

ARMADO SIN MOTIVO

Por la noche, pasadas las 20, otro grupo de oficiales detuvo a un joven de 18 años en la zona del barrio Mil Viviendas. Un vecino se acercó al móvil preocupado por la sospechosa permanencia de un desconocido en las inmediaciones de las calles Wenceslao Domínguez y Paysandú. Por tal motivo, el patrullero fue al lugar y allí encontraron al sujeto, que caminaba por las cercanías mientras se acomodaba en varias ocasiones algo en la cintura.

El sospechoso fue demorado y tras una rápida revisión, encontraron que lo que llevaba en la cintura no era otra cosa que un cuchillo de cocina, de unos 20 centímetros de hoja.

El joven, del que luego se supo tiene 18 años, no pudo responder a los policías qué hacía con el arma blanca en su poder, y por este motivo fue llevado demorado. Al igual que en el caso anterior, este sujeto fue llevado de inmediato hasta la comisaría correspondiente.

Jueves, 20 de febrero de 2014