El ex futbolista y el boxeador, ambos mexicanos, se encontraban en el lugar donde fue asesinado Francisco Rafael Arellano Félix, ex líder del cártel de Tijuana.

La información la confirmó este jueves una fuente oficial. Los deportistas "sí asistieron a la fiesta" donde aparentemente una persona disfrazada de payaso asesinó al hombre, dijo Gamill Arreola, titular de la fiscalía de Baja California Sur, donde ocurrió el crimen.

El hijo del legendario campeón de boxeo Julio César Chávez y Borgetti, delantero del Santos Laguna en la década de 1990, "ya rindieron su declaración ministerial", añadió el funcionario, quien se negó a dar detalles del caso, "ya que continúan las investigaciones".

La noche del 18 de octubre, Arellano fue asesinado en una lujosa residencia turística ubicada en Cabo San Lucas mientras se ofrecía una fiesta.

Las más de 40 declaraciones que se han obtenido por este caso, coinciden en que una persona disfrazada de payaso fue quien ejecutó al mayor de los Arellano Félix, quien tenía 63 años.

En la década de 1990 y principios de los años 2000, el cártel de Tijuana llegó a tener el control del tráfico de cocaína que iba de esa urbe del noroeste de México a la vecina San Diego, en el sudoeste de los Estados Unidos. Sin embargo, la organización criminal ha venido perdiendo poder debido a escisiones internas.

Francisco Arellano Félix fue detenido por venta de droga en agosto de 1980 en San Diego, pero tras lograr la libertad bajo fianza se escapó a México.

En 1993 fue arrestado en su país y encarcelado por narcotráfico para luego ser extraditado a Estados Unidos en 2006, donde fue condenado a seis años de prisión tras declararse culpable de haberle vendido estupefacientes a un agente estadounidense encubierto.

En 2008 fue liberado por buena conducta, según dijo entonces a la prensa su defensa, y repatriado a México.

El cártel de Tijuana nació a principios la década de 1990 paralelamente al cártel de Sinaloa -liderado por Joaquín "El Chapo" Guzmán, considerado el narcotraficante más poderoso-, producto del desmembramiento del cártel de Guadalajara, fundado por el encarcelado Miguel Ángel Félix Gallardo y el prófugo Rafael Caro Quintero.

Viernes, 1 de noviembre de 2013