Las ventas en supermercados tuvieron un mejor desempeño que en los autoservicios mayoristas. El impacto de la inflación y la relevancia de los programas de descuento.

Las ventas en supermercados llegaron a $23.137 millones en septiembre, en la medición a precios constantes, lo que marcó un leve incremento de 0,8%, mientras que medidos a precios corrientes se ubicó en $232.153, lo que marcó un incremento del 88,7%, informó esta tarde el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

De esta manera las ventas en las grandes cadenas volvieron en septiembre al terreno positivo, tras la baja temporal de agosto (-0,2%) en la medición sin considerar la inflación.



En el caso de los autoservicios mayoristas, las ventas cayeron -3,8% en el mes respecto del mismo mes del año anterior, y llegaron a $3939 millones. Por su parte, en la medición a precios corrientes, las ventas en estos locales terminaron el mes en $38.725 millones, lo que supone un avance de 82,7%.



En cuanto al canal online, que todavía representa una porción marginal del negocio (3,6%), las ventas también se mueven a ritmo más lento que las ventas en los locales físicos.

En el caso de los supermercados se observa un incremento de 88,2% ($8.311 millones), mientras que en el caso de autoservicios mayoristas no se registraron ventas vía internet.

Si bien no hay datos que lo corroboren, se presume que la buena performance de las ventas en supermercados, responde a las ofertas, los programas de descuentos como Precios Cuidados o Precios Justos, y promociones bancarias, que terminan capturando gran parte de la demanda.

Viernes, 25 de noviembre de 2022